Hoy: 22 de noviembre de 2024
Después de treinta años juntos habían quedado en el bar de enfrente para decirse que ya no se querían.
Se miraron a los ojos a través de los vasos llenos de ginebra y quedaron todas las palabras congeladas en insistentes descuidos. ¿De qué balcón, en qué momento el amor se quebró por la desgana?
Después de media hora con el vaso en la mano, ambos miraron el reloj comprendiendo que se les fue la hora de aquella coincidencia. Sin anillos ya. Sin la memoria del beso, los hijos rodaron silenciosos por el sentimiento: tampoco ellos evitaron el desgarro de decirse que ya no se querían. No hubo alcohol que lograse el regreso. Treinta años juntos y sólo saben decir que apenas sí se habían conocido.