Desde Estados Unidos dicen comprometerse a “promover la seguridad energética europea” y von der Leyen avanza la “respuesta más fuerte posible” tras las sospechas de sabotaje
Ya son varios los países que se suman a las sospechas sobre actos de sabotaje contra el gasoducto ruso “Nord Stream”, situado en el mar Báltico. En concreto, Dinamarca y Suecia fueron los que ya alertaron este martes de fugas en los terminales 1 y 2, que proporcionaban el suministro de gas ruso a Europa y que actualmente se encontraban fuera de servicio.
La primera ministra de Dinamarca, Mette Frederiksen, afirmó tras conocerse la noticia que las fugas de gas registradas era poco probable que fueran “accidentales”, puesto que se trata de tres fugas simultáneas. Aun así, Frederiksen señaló que es pronto para sacar conclusiones al tratarse de “una situación extraordinaria”, según ha informado Europa Press y ha recogido este medio.
Como medida de protección frente a los hechos ocurridos, las Fuerzas Armadas danesas han establecido “zonas de exclusión” alrededor de las fugas para “asegurar la seguridad y el tráfico marítimo y aéreo”.
Los primeros ministros de Polonia y Noruega, también han apuntado a un acto de sabotaje en el Nord Stream, aunque por el momento no haya un anuncio oficial sobre las causas. Sin embargo, sismólogos suecos han ido más allá en las acusaciones y han confirmado explosiones que se detectaron en la zona, horas antes de confirmarse oficialmente las fugas.
Desde Estados Unidos también se han sucedido las reacciones de condena a este suceso. El secretario de Estado, Antony Blinken, ha manifestado que, de confirmarse el sabotaje, “no beneficiaría a nadie”. No obstante, el diplomático estadounidense considera que estas fugas no tendrán un “impacto significativo” en la “seguridad energética de Europa”, gracias al trabajo conjunto que se lleva a cabo.
Por su parte, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha adelantado que la Unión Europea responderá de la forma “más fuerte posible” en el caso de que se demuestre que las fugas en el gaseoducto Nord Stream hayan sido intencionadas.