Los enfrentamientos intrapartidistas en las filas de los Republicanos estaban bloqueando el ascenso de McCarthy
A primera hora del sábado, el republicano Kevin McCarthy ha sido escogido como presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, sustituyendo a la demócrata Nancy Pelosi. La votación fue una de las más tumultuosas y caóticas de la historia moderna de Norte America puesto que compañeros Republicanos de McCarthy estaban bloqueando su acenso porque no lo consideran lo “suficientemente conservador”. Finalmente, posada la medianoche y en la decimoquinta votación el californiano consiguió el puesto por el que tanto había luchado.
La tardanza en escoger un líder republicano para la Cámara de los Representantes ha puesto a prueba la capacidad de la mayoría republicana en gobernar. Sin embargo, tras su elección, atribuida al Donald Trump por apoyarlo y por hacer llamadas tardías “ayudando a obtener esos votos finales”, según declara el californiano, McCarthy está ansioso por enfrentarse al presidente Joe Biden y a los demócratas. “Ahora comienza el trabajo duro” declaró, prometiendo citaciones e investigaciones.
Asimismo, con la elección de McCarthy, la Cámara finalmente puede jurar a los nuevos legisladores elegidos que habían estado esperando toda la semana a que la Cámara comenzara formalmente la sesión 2023-24.
La lucha interna
Los Republicanos tardaron cuatro días y 14 votaciones en ponerse de acuerdo mientras que las tensiones estaban creciendo, llevando incluso a altercados violentos entre miembros del Partido Republicano. Esta inestabilidad entre las filas de los conservadores parecía apuntar que el candidato Demócrata Hakeem Jeffries iba a salir ganador con 216 votos frente a los 212 de McCarthy.
Sin embargo, McCarthy logró asegurar los votos que necesitaba para salir adelante, aunque esto lo ha debilitado ya que ha tenido que aceptar muchas de las demandas de sus detractores, entre ellas incluida la restitución de una norma de la Cámara de Representantes que permite a cualquier miembro convocar una votación para expulsarlo de su cargo.