Hoy: 23 de noviembre de 2024
El presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) y cardenal arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, ha arremetido contra las leyes “de profundo calado ideológico” que está sacando adelante “por la vía rápida” el Gobierno de coalición, como la Ley Trans, y ha advertido de que la autodeterminación de género que contempla esta norma “no tiene fundamento médico ni científico, y supone transformar en ley el mero deseo de personas”.
“Tanto la nueva ley del aborto como la denominada ‘Ley Trans’ inciden y afectan a los niños, adolescentes y jóvenes, que están en un proceso vital de madurez. Así, la llamada autodeterminación de género, auténtica piedra angular de esta norma, no tiene fundamento médico ni científico, y supone transformar en ley el mero deseo de personas, en muchos casos jóvenes en proceso de madurez, que pueden ver comprometido seriamente su futuro con actuaciones para las que ya no existe vuelta atrás”, ha avisado Omella.
Así se ha pronunciado este lunes durante el discurso inaugural de la CXX Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española, que se celebra a lo largo de esta semana en Madrid, y en la que se elegirá nuevo secretario general y portavoz de los obispos españoles.
Ante esta situación, el presidente de la CEE ha abogado por “acompañar, y mucho, al niño, adolescente y joven que sufre una crisis de identidad” y ha ofrecido la Iglesia como “hogar” para ellos.
En este sentido, el cardenal Omella , “en los últimos meses, se han puesto en marcha varias iniciativas legislativas que no ayudan a educar a los adolescentes y jóvenes en la belleza y en el sentido de la sexualidad y que, además, no potencian la responsabilidad de sus actos ni la valoración madura y sosegada sobre las consecuencias”. “¿Por qué estas prisas? ¿Por qué este intervencionismo estatal?”, se ha preguntado.
Así, también se ha referido a la reforma de la Ley de Salud Sexual y Reproductiva y de Interrupción Voluntaria del Embarazo para lamentar que en esta norma “se refuerza el derecho del fuerte sobre el débil, cerrando los ojos a todos los avances de la ciencia que documentan que, en el seno de una mujer embarazada, existe una nueva vida distinta de la suya, que es preciso cuidar, acoger y defender”.
“La infancia, adolescencia y juventud muestra síntomas de sufrimiento. Hay causas reconocibles: la inestabilidad familiar y la crisis de identidad provocada por las ideologías de género. Frágiles y vulnerables, necesitan seguridad y unos valores estables”, ha remarcado.