En un giro significativo en el caso Samuel, el Juzgado de Instrucción nº8 de A Coruña ha concluido la fase de instrucción y ha decidido llevar a juicio oral a cinco acusados por el brutal asesinato del joven. El juez a cargo ha establecido que existen suficientes indicios para imputar a los acusados como coautores de un delito de asesinato, destacando las agravantes de alevosía y ensañamiento.
El proceso judicial se centra en la presunta implicación de los acusados en un ataque fatal contra Samuel, en el que, según el auto del juez, dos de ellos, «con el propósito de causar el fallecimiento», propinaron patadas y puñetazos en la cara y la cabeza. En un acto de unidad, la mujer acusada intentó evitar que la víctima recibiera auxilio de una amiga.
El juez describe la escena como un asedio coordinado en el que la víctima se encontraba indefensa y vulnerable, rodeada por un grupo de agresores en una situación de claro desvalimiento, sin posibilidad de defensa.
Dos de los acusados enfrentan, además, la agravante de discriminación por condición sexual, al haber atacado a Samuel por este motivo. Todos los encausados se enfrentan a penas de prisión, solicitadas por las acusaciones, que van desde los 22 años para la mayoría de los acusados hasta los 25 años para aquellos considerados responsables de la discriminación por orientación sexual. Adicionalmente, se pide una condena de 5 años por el delito de robo con violencia del móvil de la víctima.
Aunque las detenciones se llevaron a cabo poco después de los hechos, la instrucción del caso resultó compleja, especialmente debido a las comisiones rogatorias enviadas a Estados Unidos para obtener acceso al contenido de las cuentas en redes sociales y aplicaciones de los sospechosos. Se espera que el juicio, que contará con jurado popular, se celebre en la Audiencia Provincial de A Coruña antes del verano, después de haber finalizado la instrucción del caso.
Actualmente, tres de los acusados permanecen en prisión, mientras que los otros dos están en libertad, manteniendo así su situación personal hasta el desarrollo del juicio. El caso Samuel continúa siendo un trágico recordatorio de la necesidad de abordar la discriminación y la violencia con determinación y justicia.