Hoy: 23 de noviembre de 2024
Varapalo para Telecinco y para Kiko Hernández. El Juzgado de Instrucción número 2 de Arcos de la Frontera (Cádiz) ha condenado al colaborador y a los programas Sálvame y Socialité por un delito de acoso físico y online a Julia Janeiro, hija de Jesulín de Ubrique y María José Campanario.
El fallo de la sentencia, a la que ha tenido acceso El Confidencial, señala que Mediaset incurrió en un “delito de intromisión ilegítima en el derecho al honor, la intimidad personal y familiar y a la propia imagen” de la joven, quien además fue la que interpuso la demanda.
Un año y medio después, Julia Janeiro ha ganado la batalla judicial y tendrá que ser indemnizada con un total de 220.000 euros: 190.000 euros por parte de las cadenas y 30.000 euros por parte del colaborador Kiko Hernández, por unas declaraciones realizadas en dos programas de Sálvame.
Todo comienza cuando la hija de Jesulín y María José Campanario cumple 18 años. Telecinco decide despixelar y emitir las fotos de la joven en televisión. A partir de ahí, comienzan a darse titulares e informaciones sobre su vida privada. “La mayoría de edad de Julia Janeiro, hoy, en Sálvame“, rotulaban en uno de los programas.
“Que tus padres sean famosos no te hace figura pública, sobre todo cuando siempre has rechazado dar entrevistas y hablar con medios (…) El hecho de que Julia publicara en Instagram muchas fotos personales no es excusa para que un medio o una tele las coja sin permiso expreso para destripar su vida“, explican los abogados de Julia Janeiro a El Confidencial.
Por su parte, los abogados de la cadena basan su defensa en la actividad pública de la joven como influencer. “Mostrar tu vida privada en Instagram y convertirte en influencer no implica convertirte en esclavo de ello. Si nunca has colaborado con la prensa rosa, ni concedido entrevistas donde hablas de tu vida privada, no eres persona pública a efectos jurídicos”, aclara uno de los abogados de Julia.