Icono del sitio FUENTES INFORMADAS

Suecia asume la presidencia del Consejo de la UE

El primer ministro de Suecia, Ulf Kristersson y la presidenta del Parlamento Europeo Roberta Metsola | Fuente: Consejo de la Unión Europea

El primer ministro de Suecia, Ulf Kristersson y la presidenta del Parlamento Europeo Roberta Metsola | Fuente: Consejo de la Unión Europea

A partir del 1 de enero de 2023 el país nórdico asumirá el puesto para los próximos seis meses

Suecia asumirá este 1 de enero la presidencia rotatoria del Consejo de la Unión Europea durante los próximos seis meses. La presidencia sueca se produce en un momento en el que Europa está pasando por la crisis de seguridad más grave desde la Segunda Guerra Mundial, por lo que los retos a los que se enfrenta Suecia, país que preside el Consejo por tercera vez, son extremadamente complejos al tener que encontrar compromisos entre los Veintisiete, así como construir un consenso en las instituciones europeas.

Suecia piensa acometer su presidencia apoyada sobre cuatro pilares: migración, medioambiente, el conflicto entre Rusia y Ucrania y las relaciones comerciales con Estados Unidos.

Migración

El ‘problema’ migratorio está en el orden del día y es uno de los principales temas que causa tensiones entre los países de la Unión, por lo que durante su presidencia, Suecia tendrá que abordarlo plenamente teniendo en cuenta la postura de Países Bajos y Austria que están presionado para celebrar una cumbre extraordinaria en febrero, que se dedicará a los problemas migratorios.

Según declaraciones del primer ministro sueco, Ulf Kristersson, “ahora se están experimentando oleadas de migración que se acercan a lo que vimos en 2015. Para ellos, este es un problema urgente, y están exigiendo que Europa actúe“, finalizó después de la última cumbre de la UE.

Por lo que, Suecia deberá continuar el trabajo con una serie de propuestas legislativas que sientan las bases para un nuevo sistema de migración en la Unión Europea, enfrentándose al problema de los refugiados.

Medioambiente

El tema medioambiental es tal vez uno de los puntos más difíciles de resolver teniendo en cuenta la aplicación del gran paquete climático “Fit for 55” que contiene varias medidas destinadas a ayudar a la Unión Europea a alcanzar el objetivo de reducir las emisiones un 55%para el año 2030.

Los estados miembros aún tienen que ponerse de acuerdo sobre múltiples cuestiones de energía y transporte, incluida la eficiencia energética, los impuestos sobre la energía, las fuentes de energía renovables y las nuevas normas para el combustible de aviación.

2023 es un año decisivo para romper la dependencia energética de Europa de países como Rusia y China por tanto la Unión Europea está empeñada en construir relaciones económicas sólidas con socios “fiables”. Es decir, será necesario avanzar en la finalización de pactos de libre comercio con países como México, Nueva Zelanda o el bloque de Mercosur.

Asimismo, Suecia tiene una serie de puntos de vista críticos y preocupaciones sobre las consecuencias de las medidas para restaurar los bosques y la tierra: desde la silvicultura y la minería hasta la planificación de parques y los campos de entrenamiento militar.

Guerra

En un discurso reciente, el primer ministro sueco Ulf Kristerssen reconoció que “la Unión que se convirtió en sinónimo de paz, libertad y comercio vive ahora junto a la clase de guerra que una vez creó la necesidad misma de la UE. La guerra tendrá repercusiones decisivas para la presidencia sueca“. Debido a esto, la seguridad de la UE se sitúa en lo alto de las prioridades de Suecia en su presidencia, tanto desde el apoyo sin fisuras a Ucrania frente a Rusia como la necesidad de reforzar el peso geopolítico de los Veintisiete, en un mundo “cada vez más inseguro”.

Sin embargo, Kristerssen se muestra optimista: “La unidad que la UE ha demostrado desde que Rusia lanzó su guerra de agresión contra Ucrania es una fuerza. Estamos interconectados y estamos mejor juntos. La Unión Europea se ha fortalecido de las crisis pasadas. Lo haremos de nuevo“, finalizó Kristerssen.

Estados Unidos

En la última cumbre de diciembre, los líderes de la UE pasaron horas discutiendo el deterioro de la competitividad de la UE y el gran paquete de ayuda de los Estados Unidos para mitigar los efectos de la inflación. El paquete contiene importantes inversiones en la transición verde que, sin duda, son bienvenidas por los países de la UE pero al mismo tiempo hacen que Europa se preocupe de que los subsidios den a las empresas estadounidenses una ventaja competitiva.

Como de costumbre, los Estados miembros tienen diferentes puntos de vista sobre cómo resolver los problemas de competencia. Algunos piden apoyo estatal y se mueven en una dirección proteccionista mientras que otros están orientados al libre comercio.

En enero, la Comisión de la UE presentará un análisis de cómo proceder.

Salir de la versión móvil