Todos los grandes temas que se desarrollan en el teatro, novelas, cuentos, ensayos… giran alrededor de lo mismo: amor, odio, muerte, celos, envidias, esperanzas… las novedades, como las aguas de los ríos, aparecen según la forma de sus cauces o las piedras estables del camino. La sorpresa de lo distinto se da cuando una luz repentina sabe mover en el alma la rutina perezosa.
En precisa ocasión me alarmé viendo a una pareja de novios pelearse. Fui hacia ellos ofreciendo armonía y me alejaron con brusquedad antes de darse un prolongado beso… Los temas a tratar son casi siempre los mismos; las personas, del todo diferentes. Según en quién, como se ha visto, la rabia puede terminar confundida en una delicia peligrosa.