El presidente de los enfermeros de España acumula un vasto patrimonio de casas de lujo

Florentino Pérez, que cobra medio millón de euros al año y tiene colocados en el Consejo a sus hijos y nueras, se presenta a las elecciones que se celebran este viernes

Florentino Pérez, de 75 años, gobierna desde hace cinco el Consejo General de Enfermería de España. Y quiere repetir en el cargo en las elecciones que se celebran este próximo viernes, pese a estar imputado en varias causas, aún vivas en los tribunales, por falsedad, distracción y uso indebido de dinero del Consejo. Su única rival en las urnas es Carmen Ferrer, quien ha ocupado altos cargos sanitarios en Madrid y que ha asegurado que entre sus objetivos está imprimir transparencia a la gestión del Consejo.

Florentino Pérez, que nada tiene que ver con el presidente del Real Madrid aunque muchas veces haya acudido a uno de sus palcos con cargo a las arcas del Consejo, cobra al año casi medio millón de euros. Además, tiene colocados en él a cinco familiares (entre hijos, hijas y yernos, excelentemente remunerados).

Solo uno de los 40 invitados asistió realmente al congreso

Pérez es también el presidente que, tras dejar los alrededor de 2.000 euros de salario mensual que le pagaba hace una veintena de años la Seguridad Social, se adentró entonces como directivo en el Consejo, de la mano de su antecesor, Máximo González, y hoy atesora un nutrido patrimonio. Tiene cinco inmuebles (entre casas y chalés: ver fotografías) y un vehículo Mercedes de lujo.

Ha decidido presentarse sin importarle los nubarrones que pesan sobre él tras haber invitado hace varios años, al poco de llegar al cargo, a una comitiva de 40 personas -entre presidentes de colegios provinciales, esposas de todos ellos y amigos- al Congreso Mundial de Enfermería, celebrado en Singapur. Lo del congreso solo fue la excusa.

El secretario general del Consejo de Enfermería fue en realidad el único de la comitiva que asistió a los actos. Los demás, al día siguiente de la inauguración del evento, se fueron de viaje turístico, gratis total, durante 17 días, por Vietnam y Camboya. Y todo lo pagó el Consejo. Eso sí, perpetrando supuestos chanchullos económicos en las arcas del Consejo para aparentar que los invitados se habían pagado ellos los viajes de sus bolsillos, cuando en la práctica todo lo abonó este organismo, según documentación que obra en poder de FUENTES INFORMADAS.  

Un chollo de viaje

Un chollo de viaje que en total costó 365.266,27 euros a todos los enfermeros que pagan sus cuotas. La comitiva (la junta de gobierno y los presidentes provinciales, invitados y las esposas de todos ellos) fue agasajada, aparte de con estancias en hoteles de superlujo y un crucero, con regalos valorados en 21.569 euros.

Y, para evitarles la incomodidad de tener que llevar encima los obsequios y las compras que realizaron en Vietnam y Camboya, el Consejo también abonó otros 12.504 euros para trasladar todo ello a España vía aérea. Pérez ha explicado que ese viaje estaba casi organizado cuando él accedió al cargo. Y que el dinero salía de regalos de las compañías que tienen concertados seguros con el Consejo. Y que ese dinero podía utilizarlo el Consejo para lo que le “diera la gana”.

Para sufragar los gastos del viaje, el Consejo cometió supuestas irregularidades. Habilitó una agencia de viajes, la misma del ‘caso Gürtel’, y algunos de los viajeros aparentaron pagar de sus bolsillos el dinero correspondiente, tras lo de Singapur, a la extensión del viaje por Vietnam y Camboya.

El Consejo les prometió que a la vuelta del viaje recibirían el dinero pagado a través de artimañas económicas. Una de ellas fue la siguiente: a los que tenían relación laboral con el consejo se les subió el salario durante varios meses hasta cubrir el importe exacto abonado de sus bolsillos; también se utilizaron supuestamente falsas facturaciones por servicios inexistentes.

Pero si por algo destaca el Consejo es por sus sueldazos. Sobre todo, los de los jefes. Al año, Pérez percibe, merced a su cargo tanto de presidente en el Consejo y en varias sociedades afines, cerca de medio millón de euros. Solo por ser presidente de una de las empresas filiales percibe 180.000 anuales, más las retribuciones por pertenecer a los colegios de enfermería de Córdoba y el regional de Andalucía (a uno de ellos ha renunciado recientemente).

El Consejo de Enfermería tiene un mar de afiliados, 350.000, que pagan cuotas de unos 20 euros mensuales a través de sus colegios provinciales, 52 por toda España. Es obligatoria la colegiación, como los médicos, pero estos generan más dinero que los facultativos.

El presupuesto del Consejo es de unos 20 millones anuales, lo que le ha permitido hacerse con un ramillete de empresas filiales que también dan pingües beneficios, y lo que, entre otras cosas, ha dado lugar a las citadas investigaciones penales contra él, que aún están vivas en los tribunales por supuesto despilfarro y uso indebido de dinero del Consejo.

Para concurrir a las elecciones del viernes hacían falta un mínimo de 15 avales de presidentes provinciales. Ferrer ha conseguido 16 avales y 20 Florentino Pérez. Con 27 de los 52 presidentes que hay se ganan las elecciones.

Florentino Pérez tiene 75 años. Su abogado en las causas que aún tiene vivas por supuestos chanchullos es José Antonio Choclán, presente en buena parte de las causas más enjundiosas de los últimos años.

Florentino, casi 40 años como enfermero de la Seguridad Social, y apenas dos lustros de trabajo real en hospitales, cordobés, no solo tiene un nutrido patrimonio inmobiliario y a cinco familiares directos en el Consejo y/o sus empresas filiales (su hijo, informático del Consejo, sin estudios superiores, cobra unos 150.000 euros anuales). También ha colocado a dedo a un yerno y una nuera. Todos han experimentado fuertes subidas salariales en apenas unos años.

Chalés y dos casas en primera línea de playa

Los cinco inmuebles que ha atesorado desde que llegó al Consejo son un chalé en las afueras de Córdoba, dos pisos en primera línea de playa en Manilva (Málaga), un céntrico piso en la capital madrileña, un vehículo Mercedes, y otra enorme casa en Boadilla del Monte.

En esta última de Boadilla se han desarrollado obras de cristalería, carpintería metálica y cerramientos, entre otras reformas. Para estas reformas ha utilizado a empresas que han participado en la construcción de la nueva sede del Consejo General de Enfermería (unos 14 millones de presupuesto).

“No es moral ni normal que el presidente del Consejo pida al proveedor de la nueva sede de este organismo, que cuesta un dineral, que reforme su casa particular; este señor, antes de las elecciones, tendría que demostrar que ha pagado esa reforma mediante transferencias”, señalan fuentes de los enfermeros.