Hoy: 23 de noviembre de 2024
Las autoridades de la región ucraniana de Jersón, bajo control de Rusia, han denunciado irregularidades en la votación sobre la adhesión a Rusia y han expresado en sus testimonios el temor a una movilización forzosa.
“Hay comisiones electorales acompañadas de militares armados que recorren la región y van a la caza de votantes que tratan de evitarlos por todos los medios. Algunos ya han tenido mala suerte dos veces: han tenido que completar su papeleta y votar por segunda vez”, ha denunciado el vicepresidente de Jersón, Yuri Sobolevski, quien además ha tildado los referéndum como un “teatro del absurdo” en su canal de Telegram.
Según han señalado las autoridades regionales, las tropas rusas comprueban que todos los miembros de las unidades familiares hayan votado, y si no es así, se obliga a uno de ellos a depositar votos en las urnas por cada uno de sus familiares.
Las amenazas también han llegado a los habitantes de la ciudad de Bilovodsk, a quienes se les ha advertido de que la votación es obligatoria y que cualquiera que se niegue a participar será despedido de su puesto de trabajo y sus nombres serán entregados a los servicios de seguridad.
Bajo la misma situación, los habitantes de la ciudad de Starobilsk han vivido momentos de tensión: las autoridades rusas han prohibido a la población salir de la ciudad hasta el martes y se han enviado grupos armados para allanar las casas y obligar a la gente a participar en el referéndum.
Según relata la agencia Reuters, las autoridades ucranianas presentes en los territorios describen un ambiente de “coerción” y “pánico“, señalando que los ciudadanos están siendo obligados a votar.