Casa Dani: el famoso restaurante por su tortilla de patata, cerrado por 40 casos de salmonelosis

«Estaba poco hecha, me daba cosa comerla», se refiere una clienta al plato estrella del establecimiento clausurado

El restaurante Casa Dani ha cerrado por un brote de salmonelosis, que ha afectado a 40 clientes. El establecimiento es famoso por su tortilla de patata. Se ubica en el Mercado de la Paz del barrio de Salamanca de Madrid. Hasta ahora, nunca antes habían tenido un caso así o, al menos, no se había oído nada de ello al respecto.

Los casos se dieron la semana pasada. No sé sabe exactamente qué comida pudo provocar la infección. Durante el cierre temporal de Casa Dani, se está investigando la causa de la intoxicación. Uno de sus clientes, Juan Carlos, va al restaurante desde hace 25 años, y la noticia le ha pillado por sorpresa, al igual que a la mayoría de los viandantes preguntados por la situación del establecimiento.

Antonio, uno de los trabajadores que proporciona recursos a Casa Dani, cree que los clientes recuperarán pronto la confianza, al ser este caso algo excepcional en mucho tiempo. Otro de los preguntados, Jesús, también lo considera un «hecho puntual».

Por su parte, Esther, que trabaja en un banco cerca del mercado, es menos optimista. Piensa que Casa Dani tardará en recuperar la confianza entre uno o dos años. De hecho, cuenta que en su barrio había un restaurante que tuvo un caso similar de infección, y tuvo muchas dificultades para despegar.

Juan, un carnicero del mercado, no parece con una actitud muy habladora. Conoce bien a los empleados de Casa Dani, pero reconoce no saber mucho de su situación, sin atreverse a pronosticar su futuro inmediato.

Por otro lado, Ana, una fiel cliente del mercado, ve posible que haya habido más casos de salmonelosis en el establecimiento, aunque hayan pasado desapercibidos. «Cuando un restaurante aumenta de tamaño, es más difícil cumplir un protocolo», sugiere como causa de negligencia. Y apunta a los huevos con los que se elabora a la tortilla como el origen del problema. Aunque confía en que este negocio pronto despegará, debido a su alta popularidad.

Una amiga suya, muy asidua de Casa Dani, nunca toma tortilla. «Estaba poco hecha, me daba cosa comerla», reconoce por el miedo a que estuviera intoxicada por una bacteria similar a la salmonella. Por su parte, Ana califica el plato principal de «imbatible».