Hoy: 28 de noviembre de 2024
El exfiscal jefe de Tráfico de España, Bartolomé Vargas, ha visitado este lunes el programa ‘Al Grano‘ de Fuentes Informadas Radio, donde ha hablado de todo tipo de asuntos y anécdotas dada su dilatada carrera: casi 50 años desde que empezó como fiscal de la Audiencia Provincial de Tenerife en 1976 hasta el año pasado, que se ha jubilado, para ejercer la abogacía, inspirado por el ejemplo de su padre. Le indigna la actitud de aquellos que incumplen las normas desde el automóvil. “Hay conductores que tienen un concepto patrimonial de la carretera, creen que es suya“, ha sentenciado.
Asimismo, en su trayectoria hay que destacar su paso por la Fiscalía de la Audiencia de Málaga entre 1981 y 1986. A continuación, ejerció como fiscal jefe de la Audiencia de Guadalajara desde 1986 a 1994, momento en que fue trasladado, ni más ni menos, que a la Fiscalía del Tribunal Supremo. Desempeñó su labor en el Alto Tribunal hasta 2006, cuando ya finalmente encabezó el Ministerio Fiscal de Tráfico a nivel nacional. Con motivo de su reciente jubilación, ha elogiado a Luis del Río, su sucesor, antes fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Canarias.
Vargas fue de los primeros en acuñar el concepto de tránsito sostenible. Para él esta idea consiste en “proteger a las personas de la contaminación acústica y atmosférica”. A su juicio, se trata de favorecer que exista “una ciudad en la que tengan cabida todos, también la tercera edad, una ciudad que piense en los colectivos vulnerables”.
Respecto a su área de trabajo, hasta hace poco al frente de la Fiscalía de Tráfico, ha aclarado que “la seguridad vial es un término amplio, el tráfico es un término más concreto”. De este modo, se encarga de armonizar criterios de actuación para una respuesta efectiva a los ilícitos penales contra la seguridad vial, con el fin de garantizar la unidad de criterios en esta materia.
En referencia a los más débiles, de su padre ha destacado que ejerció la abogacía pensando en ellos y ha relatado un caso —ejemplo de otros tantos— que llevó su padre, en el que defendió a “una persona pobre” con el máximo interés, pasión y tesón. Lo mismo que hubiera hecho con otro cliente, aunque con más ahínco si cabe por su difícil situación económica, por esa sensibilidad con los vulnerables. “Es muy importante defender a un gran empresario, o a un asesino, pero también a los más vulnerables”, enfatiza. Y plantea la siguiente reflexión: “¿Por qué el caso de una persona es más importante por ser mediática?”.
Además, ha resaltado la abundante presencia de alcohol en las carreteras y la labor de pedagogía que se hace desde el Ministerio Público. “Hay que hacer una lucha continua. La Policía hace una labor impagable en este sentido. La Fiscalía se ha comprometido mucho con la educación, hay que educar desde niños, hasta los 6 años, que es cuando se procesa mejor la información”, ha subrayado.
Respecto a los delitos de tráfico, ha criticado la impunidad que hay. “El kamikaze tiene perfiles muy distintos. El kamikaze que produce una muerte incurre en un homicidio doloso, de 10 a 15 años de pena”.
Antes de esta ilustrativa entrevista, el director del programa ‘Al Grano’ y editor del diario digital Fuentes Informadas, Gonzalo Pérez Ponferrada; los contertulios José Antonio Hernández, director del mismo medio digital; Paco Vargas, el CEO de este; Dèlmar, el artista y miembro de ‘Al Grano’; y Miguel Hernández, redactor jefe del periódico, han comentado las noticias más importantes del día.
El 3 de agosto de 2021, en una entrevista realizada por José Antonio Hernández en su anterior etapa como jefe de Investigación en El País, Bartolomé Vargas sorprendió con un llamamiento para que la gente pueda tomar la matrícula a esos conductores irresponsables, sin infringir la norma, y, si es posible, grabe “las locuras” de los conductores temerarios y las aporten a las fuerzas de seguridad. “Son delincuentes al volante y hay que quitarlos de la carretera“.
Vargas también anunció entonces una medida hasta cierto punto polémica. Se investigarían los puntos negros en los que más accidentes se produjeran y se determinaría si la siniestralidad se debe al azar o a un fallo en la construcción de la carretera. Y se investigaría “desde los ingenieros hasta los responsables de la constructora e incluso a la Administración”. Aseguró en ese momento que lo permitía el artículo 385.2 del Código Penal, que castiga con penas de prisión y multa a quienes incumplen la obligación legal de conservar las carreteras y garantizar y restablecer la seguridad de la circulación.
Puedes escuchar este y el resto de podcasts en el canal IVoox de ‘Al Grano’.