La organización logró introducir droga en España en diversas ocasiones, empleando vehículos con dobles fondos y sistemas de ocultación
En una operación conjunta entre la Guardia Civil, la Drug Enforcement Administration (DEA) y EUROPOL, se ha desarticulado en una red criminal dedicada al tráfico de cocaína desde Sudamérica hacia Europa, especialmente a través de embarcaciones deportivas. En concreto, se han detenido a 20 personas y se han incautado tres millones de euros en efectivo en Galicia.
Esta acción se llevó a cabo en el marco de la operación Halia, tras una investigación iniciada por la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil el año pasado, en respuesta a actividad sospechosa de un grupo delictivo en la zona del Salnés, en Pontevedra.
La pesquisa se centró en una importante remesa de cocaína encargada por el grupo, que intentaba transportarla desde una embarcación nodriza en aguas del Caribe utilizando un velero. Sin embargo, las autoridades francesas intervinieron antes del supuesto alijo, inspeccionando el velero y a sus ocupantes, lo que llevó al fracaso del plan.
Esta organización logró introducir droga en España en diversas ocasiones, empleando vehículos con dobles fondos y sistemas de ocultación. Distribuían la droga desde Galicia hacia otras provincias españolas.
Los beneficios ilícitos obtenidos por esta organización superaron los 10 millones de euros, invertidos en propiedades, vehículos, embarcaciones y negocios legales como estancos y viveros de moluscos. Para blanquear el dinero, utilizaban testaferros, empresas pantalla y otras tácticas.
Además, operaban un laboratorio de adulteración de cocaína en una zona aislada de la Comunidad de Madrid, donde se estima que producían hasta 100 kilogramos de cocaína al mes.
Se confiscaron 16 vehículos, incluyendo vehículos de lujo, relojes de alto valor y armas de fuego
La desarticulación de esta organización, considerada una de las más activas a nivel nacional, resultó en la detención de 20 personas en Pontevedra, A Coruña y Madrid, con 27 registros realizados. Se incautaron más de tres millones de euros en efectivo, así como una gran cantidad de drogas que incluyen cocaína, heroína, hachís, marihuana, MDMA, éxtasis y anfetaminas.
También se confiscaron 16 vehículos, incluyendo vehículos de lujo, relojes de alto valor y armas de fuego. Se decomisaron dispositivos de comunicación encriptados y otros equipos informáticos.
El embargo de bienes valorados en más de 10 millones de euros incluyó cuentas bancarias, inmuebles, embarcaciones y actividades comerciales. La investigación fue coordinada por el Juzgado Central de Instrucción nº 6 de la Audiencia Nacional, en colaboración con la Fiscalía Especial Antidroga y unidades especializadas de la Guardia Civil, DEA y EUROPOL.