El hombre fue responsable de un accidente en el que murieron su esposa y su hija, madre de los menores asesinados
Tragedia en Huétor Tájar, un pueblo de Granada: un hombre de unos 72 años ha matado a sus dos nietos y se ha suicidado en su vivienda. El homicida, que permanecía atrincherado desde la tarde del domingo en una vivienda de Huétor Tájar (Granada) junto a sus dos nietos, de 10 y 12 años, y armado con una escopeta para la que tenía licencia de caza ha matado a los menores y posteriormente se ha suicidado, según han informado a Europa Press fuentes de la Guardia Civil.
Los agentes han irrumpido en el domicilio en torno a las 8,25 horas tras comprobar que no había movimientos en la vivienda, momento en el que el anciano se ha quitado la vida y han hallado los cadáveres de los pequeños en dos habitaciones distintas, uno de ellos con herida de arma de fuego, según ha señalado en declaraciones a los periodistas el delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández.
Fueron varios vecinos los que alertaron al 112, en torno a las 21.45 horas, de que se estaban viviendo momentos de tensión y “conflicto” en el domicilio entre el abuelo y el padre de los menores, que en un momento dado abandonó el domicilio donde luego se atrincheraría el anciano con los menores.
El accidente, el 19 de marzo
Fuentes cercanas a la investigación han precisado a Europa Press que al abuelo le quitaron el carné tras el accidente del pasado 19 de marzo en el que murieron su hija y su esposa, y mantenía discusiones con el yerno porque seguía conduciendo.
Las mismas fuentes precisan que fue el padre de los niños el que se presentó anoche en la casa y relató a los agentes el conflicto que tenía desde el accidente con el abuelo de sus hijos, que no le entregaba a los niños.
Hasta el domicilio se ha desplazado, entre otras dotaciones y cuerpos policiales, efectivos de la Unidad Especial de Intervención (UEI) llegados desde Madrid que han permanecido apostados junto al domicilio. Un negociador ha mantenido permanentes conversaciones con el anciano para que depusiera su actitud sin que este haya dejado “en ningún momento” la escopeta que portaba entre las manos.
Disparos al aire para avisar de que iba armado
Es más, a la llegada de los agentes efectuó dos disparos al aire desde la ventana para alertar de que iba armado, lo que ha llevado inmediatamente al Instituto Armado a activar el protocolo para estos casos. El contacto se ha cortado sobre las cinco de la madrugada, cuando el hombre ha trasladado a los agentes que no podía continuar hablando porque en un rato debía preparar a los pequeños para ir a clase, ha relatado Pedro Fernández.
Los agentes han quedado a la espera de que este hito pudiera producirse, usando los medios tecnológicos que tenían a su alcance para escuchar y visibilizar al máximo posible lo que pudiera estar ocurriendo en el interior de la vivienda. No obstante, han dado las ocho de la mañana y la salida de los pequeños para ir al colegio no se ha producido.
“Este ha sido el momento más complicado”, según ha reconocido el delegado del Gobierno en Andalucía, pues al ver que no salían “ya se toma la determinación de que hay que entrar”. Ha sido al acceder los agentes cuando el abuelo se ha suicidado y han descubierto a los dos menores sin vida, cada uno en una habitación distinta y uno de ellos con evidentes signos de haber sido disparado.
Disparó a uno de los niños y asfixió al otro
La investigación apunta, a la espera de autopsia, que antes mató de un disparo a un nieto y el otro murió por asfixia, según han precisado a Europa Press fuentes cercanas a la investigación.
Pedro Fernández ha trasladado el pésame a los familiares por esta “trágica pérdida” que ha dejado al municipio “absolutamente consternado” y ha confirmado que tanto el abuelo como los menores sufrieron un accidente de tráfico el pasado marzo en el que murieron su esposa y la padre de los niños. Fuentes de la Guardia Civil han detallado a Europa Press que el accidente se produjo porque el abuelo sufrió una “apnea respiratoria”.