Hoy: 22 de noviembre de 2024
Un estudio advierte la eficiencia real de filtración bacteriana presente en diferentes tipos de mascarillas faciales, un equipo de investigación de la Universidad Politécnica de Madrid ha llevado a cabo un estudio exhaustivo. Este estudio tuvo en cuenta tanto la eficiencia de filtración bacteriana proporcionada por los fabricantes como el flujo de aire que atraviesa las mascarillas. Los resultados, obtenidos a través de un dispositivo patentado, revelaron datos sorprendentes sobre la capacidad de protección real ofrecida por estos elementos esenciales en la lucha contra la transmisión de virus respiratorios.
En el estudio, se sometieron a prueba nueve tipos diferentes de mascarillas faciales, que incluyeron dos modelos quirúrgicos, tres modelos higiénicos, tres modelos FFP2 y un modelo FFP3. Estas mascarillas se probaron en un maniquí equipado con tres analizadores de gases que medían los volúmenes de entrada, salida y sobrante. Además, se midió la presión requerida para vencer la resistencia que ofrecían las mascarillas durante los procesos de inhalación y exhalación.
Los resultados de este estudio indicaron que la capacidad de filtración real de las mascarillas faciales se ha sobreestimado en general. En promedio, aproximadamente la mitad del aire que ingresó al sistema no fue filtrado por las mascarillas, independientemente de la intensidad respiratoria. Sin embargo, se observó una variabilidad significativa en el rendimiento entre los diferentes tipos de mascarillas.
El estudio demostró que el tejido utilizado en las mascarillas tiene un impacto significativo en la eficacia de la filtración, lo que lleva a la conclusión de que las mascarillas faciales higiénicas filtran más del 70 por ciento del aire y mantienen una eficiencia constante independientemente de la intensidad de la respiración. Por otro lado, las mascarillas de tipo no higiénico exhibieron un rendimiento claramente inferior y se vieron influenciadas por la cantidad de aire movilizado.