La transformación del hombre, que sin querer queriendo propone Neruda como mensaje poético, viene de la paz y de la gloria, de mayúsculo remo, de la complacencia que dejan los amigos.…
La fuerza de Dios es la comunión de los servidores, de las personas audaces, de los profetas sin nombre, de los que hacen la paz y de los que sufren por la justicia…
Que este nuevo año sea el de la buena gente, el de personas comprometidas, solidarias, el del respeto y los valores, el de las oportunidades, un año con más sonrisas que dolor…