Según un estudio publicado en la revista Cell Metabolism, los colorantes alimentarios artificiales pueden causar enfermedades cuando el sistema inmunitario se ha desregulado.
La investigación, realizada en ratones, descubrió que los animales desarrollaban colitis cuando consumían alimentos con colorantes alimentarios artificiales. En concreto, son los colorantes FD&C Rojo 40 y Amarillo 6 los que producen esta afectación cuando un componente específico de su sistema inmunitario, conocido como citoquina IL-23, estaba desregulado.
El equipo formado por investigadores de la Escuela de Medicina Icahn del Monte Sinaí, en Estados Unidos, pretenden vislumbrar si estos resultados se pueden trasladar al ser humano. Los investigadores tienen previsto estudiar cómo la citocina IL-23 promueve el desarrollo de la colitis tras la exposición a los colorantes alimentarios.
“Los cambios drásticos en la concentración de contaminantes en el aire y el agua y el mayor uso de alimentos procesados y aditivos alimentarios en la dieta humana en el último siglo se correlacionan con un aumento de la incidencia de enfermedades inflamatorias y autoinmunes”, señala el autor principal Sergio Lira, profesor de Inmunología en el Instituto de Inmunología de Precisión en Icahn Mount Sinai.
“Se cree que estos cambios ambientales contribuyen al desarrollo de estas enfermedades, pero se sabe relativamente poco sobre cómo lo hacen. Esperamos que esta investigación sea un paso hacia la comprensión del impacto de los colorantes alimentarios en la salud humana”.