El Tribunal Supremo ha confirmado una condena de 9 meses de prisión a un trabajador del Servicio de Cementerios del Ayuntamiento de Langreo, Asturias, por conductas de acoso laboral hacia una compañera. Según la sentencia, el individuo humillaba diariamente a la mujer y llegó a encerrarla en un panteón de tres metros de profundidad durante 20 minutos al quitarle la escalera para que no pudiera salir.
Además de la pena de prisión, el tribunal ha ordenado al agresor indemnizar a la víctima con 3.000 euros por daños morales, ya que considera que se han cumplido todos los requisitos para establecer el acoso laboral, al atentar contra la dignidad de la mujer.
La noticia destaca que esta sentencia ratifica las decisiones previas del Juzgado de lo Penal Nº1 de Langreo y la Audiencia Provincial. Se señala también que, según informes del periódico La Voz de Asturias, la confirmación de la condena permitirá al ayuntamiento reactivar un expediente disciplinario que se había abierto hace seis años.
Las acusaciones contra el trabajador incluyen comentarios vejatorios hacia las mujeres en general, calificándolas como «todas putas» y sugiriendo que solo servían para cocinar y mantener relaciones sexuales. El individuo afirmaba que el cementerio era exclusivamente suyo y expresaba su rechazo a tener mujeres trabajando en él, llegando al extremo de expulsar a la víctima del grupo de WhatsApp del trabajo para que no pudiera recibir avisos laborales.
El impacto psíquico y moral en la víctima fue considerable, según la información proporcionada. El trabajador incluso llegó a decirle que le estaba quitando el empleo a un padre de familia.
Estos comportamientos misóginos y de acoso laboral han sido condenados de manera contundente por el Tribunal Supremo, respaldando así las decisiones judiciales previas y reconociendo el sufrimiento psicológico infligido a la mujer afectada.