Hoy: 29 de diciembre de 2024
Después de la reunión bilateral que mantuvieron el presidente argentino Javier Milei y el canciller británico en el marco del Foro Global de Economía de Davos, los analistas del país sudamericano sospechaban que las relaciones entre ambos estados se iban a estrechar por la actitud genuflexa que tiene Argentina hacia las primeras potencias occidentales. Aunque nunca se estimó que un mandatario argentino avalara la visita del canciller David Cameron a las Islas para que el país saqueado vuelva a prestarle servicios desde el continente.
Es cierto, que los intereses británicos en Argentina no se reducen al despojo del archipiélago del sur, sino hay más y tal vez, más sólidos en materia económica y estratégica. Se nota en la Patagonia y en el mundo financiero. Pero, Malvinas tiene un componente histórico, emocional y simbólico esencial para la argentinidad. Hay muchas vidas de jóvenes argentinos ofrendadas en esa porción de tierra rodeada de aguas heladas.
Es muy difícil, para una parte sensata de la sociedad latinoamericana, admitir que todo se degrada en el país del tango, que no se respeta ni las muertes, ni la sangre derramada de sus héroes.
Introducir graciosamente la derogación de la Ley de Tierras, es decir, habilitar que corporaciones extranjeras compren extensas estancias en zona de frontera en el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) y luego, en la denominada Ley Ómnibus, ¿qué significa? ¿es tan urgente derogar una ley que protege los intereses nacionales?
Desde hace años, el conflicto de Malvinas se extendió por el continente, más precisamente por la Patagonia, y la lucha como símbolo de protección soberana se sostiene a través de un grupo de argentinos que se identifican como “La Columna Juana Azurduy”, y que el año pasado llegó a la mansión del magnate británico Joe Lewis -que usurpa la reconocida fuente de riquezas naturales como es el Lago Escondido-.
En ese contexto, el ex combatiente de Malvinas, soldado clase 62, Ricardo Vélez, señaló a Fuentes Informadas, que las asociaciones de ex combatientes aún no pueden reaccionar ante semejante afrenta. “No duele, nos desarma, y la reacción puede ser dramática, aunque sectorizada”.
Como es su estilo, confrontativo y sin escala de valores, el actual gobierno puede cambiar de opinión en un lapso de cinco minutos, y sus funcionarios pueden jugar con la retórica o desdecirse con una frescura envidiable de cualquier grupo de cínicos.
La diplomacia británica no juega, el mundo lo sabe. El canciller David Cameron desde Puerto Argentino, dijo que espera que las islas sigan bajo bandera británica “por mucho tiempo, posiblemente para siempre”. Su par argentina, un día después, reaccionó con ironía, como si fuera un debate televisivo. No hubo reclamo formales ni repudio de ninguna clase oficial.
La canciller argentina, Diana Mondino, solo le dedicó este martes una irónica respuesta al viaje de Cameron a las Islas Malvinas. La funcionaria le agradeció a través de sus redes sociales por “incluir a la Argentina en su visita a la región”.
“Valoramos el gesto del canciller Cameron de incluir a la Argentina en su vista a la región. Estaremos felices de recibirlo, en una próxima ocasión, también en Buenos Aires”, fue el mensaje de la diplomacia argentinas.
Cameron afirmó apenas llegó a la capital, Puerto Argentino que mientras los habitantes de Malvinas quieran ser parte del Reino Unido “son absolutamente bienvenidos” por el gobierno al que representa. “Los apoyaremos y ayudaremos a protegerlos y defenderlos absolutamente, en lo que a mí respecta, por el tiempo que quieran. Y espero que sea por mucho, mucho tiempo, posiblemente para siempre”.
Fuentes cercanas al Ministerio de Relaciones Exteriores informaron que Mondino tiene en su agenda una reunión bilateral con el propio Cameron, pero en Brasilia, capital de Brasil que se daría este miércoles en el marco de la cumbre de cancilleres del G20, que se realizará en el país que gobierna el presidente Lula, totalmente enemistado con el presidente Milei.
A Brasil llegará también otro hombre clave para la diplomacia argentina: el secretario de Estado de EE.UU., Anthony Blinken, que después viajará a Buenos Aires para avanzar en una agenda poca difundida, pero que ya está en marcha con el propio presidente argentino. Esa reunión se llevará a cabo el viernes en la Casa Rosada.
La visita de Cameron a Malvinas es la primera que se realiza desde 2016 cuando la visitó un funcionario británico.
Al diferendo que mantiene Argentina con Gran Bretaña Milei lo quiere resolver con su impronta. Propone una salida similar al acuerdo negociado por Inglaterra con China respecto a Hong Kong.
“Nosotros queremos ir a una solución factible respecto a las Islas Malvinas. Inglaterra tuvo un conflicto parecido a este: fue con China y por el caso de Hong Kong. Nosotros proponemos una solución similar, donde por la vía diplomática Inglaterra nos devuelva las Islas. Pero en ese proceso, usted no puede dejar de lado lo que pasa con aquellos que viven en las Islas. Es decir, usted tiene que buscar una solución no solo con Inglaterra, sino que además tiene que contemplar los intereses de los que viven en las Islas”, argumentó Milei en su momento.
Desde la oposición, Gustavo Melella, gobernador de Tierra del Fuego, distrito argentino al que pertenecen las Islas Malvinas, declaró al Canciller Cameron como “persona non grata” y calificó el viaje como una “verdadera provocación” contra la soberanía argentina.
Me parece bien que el presidente vaya a visitar, no lo veo como algo malo
por si quedaba alguna duda de que estamos frente a un gobierno cipayo y entreguista, toda esta secuencia lo confirma