Fuentes del grupo parlamentario aducen tener “dudas” sobre la futura aplicación de la nueva redacción de la malversación “por parte de los jueces”
Unidas Podemos se ha desmarcado de la enmienda para reformar el delito de malversación y no firmará junto al PSOE la enmienda transaccional a la proposición de ley de reforma del Código Penal, aunque permitirá que el pacto entre Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y el socio mayoritario del Gobierno “no descarrile” en la ponencia de este lunes.
Según ha informado Europa Press, fuentes del grupo parlamentario morado han asegurado que tienen “dudas” sobre la futura aplicación del nuevo redactado de este ilícito penal “por parte de los jueces”.
No obstante, el partido no obstaculizará que la transaccional, que fijará definitivamente la enmienda, salga adelante porque la propuesta “contiene elementos tan importantes” como la sustitución del delito de sedición por el de desórdenes públicos agravados. También defiende en este sentido las medidas para imponer reproches penales a los vocales del Consejo General del Poder Judicial que bloqueen la renovación del Tribunal Constitucional en la cuota que le corresponde al poder judicial.
ERC presentó el pasado viernes una enmienda para crear un nuevo tipo dentro del delito de malversación para castigar con menos cárcel –con una pena de entre 6 meses y 3 años de prisión– a quienes malversen dinero público pero sin ánimo de lucro personal.
Este domingo trascendió que a raíz de la propuesta de ERC el Ejecutivo iba a añadir un nuevo tipo de malversación que castiga el desvío del erario público de forma irregular dentro de la Administración Pública hasta con cuatro años de prisión y seis de inhabilitación.
“Efectos perversos” en la lucha contra la corrupción
La decisión de Unidas Podemos de desvincularse de esta reforma ha creado un gran debate en el seno del espacio político porque, según manifestaron, se trataba de una cuestión “muy delicada” que podía causar “efectos perversos”. Una determinación en consonancia con la no presentación de enmiendas a este respecto, como afirmó la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz.
El espacio confederal ha analizado de forma exhaustiva la propuesta de los republicanos, pero finalmente se han inclinado por no apoyar una modificación que puede suponer beneficios a la corrupción política. El propio Pablo Echenique, portavoz parlamentario de Podemos, apuntó que cualquier reforma de la malversación no debía servir de ayuda a investigados o condenados en casos como ‘Lezo’, ‘Púnica’ o ‘Kitchen’.
Aun así, el sector catalán de Unidas Podemos es más favorable a abordar esta reforma. Jaume Asens, el presidente del grupo parlamentario y líder de En Comú Podem, destacó que la música le “sonaba bien” dado que veía razonable establecer una diferencia entre el enriquecimiento ilícito y la administración desleal de recursos públicos. En ese sentido, argumentó que el texto que aprobó el Partido Popular en 2015 era una “chapuza” porque estaba destinado a “perseguir al independentismo”.