En muchas de sus aristas, Felipe II fue un buen rey, aunque algo desmedido. Se casó tres veces, que ya es una exageración y , de los hijos que tuvo, únicamente las hembras destacaron. El infante Carlos, un despropósito genético; el sucesor,
"Cuando España era la 10ª potencia económica mundial, se hacían carreteras, hospitales, viviendas sociales, pantanos... y los españoles no pagaban IVA, IRPF ni IBI"