Las críticas de Page hacen sangre en el PSOE

La dirección del PSOE no tiene intención de tomar medidas disciplinarias contra el presidente de Castilla La Mancha

Las críticas del presidente de Castilla La Mancha y secretario general en esta comunidad, Emiliano García Page, en las que declara que el PSOE actual está en el extrarradio de la Constitución por sus decisiones en relación con la amnistía a los procesados por el golpe de en Cataluña, han escocido mucho en el partido.

La durísima valoración del dirigente socialista compartida por otros dirigentes históricos como Felipe González o Alfonso Guerra, han hecho sangrar a los actuales dirigentes, que se han lanzado en tromba en defensa de la política de Pedro Sánchez y en contra el político manchego.

“Yo gano elecciones”

El más fiero ha sido, como es habitual el ministro Óscar Puente, para quien el que está en el extrarradio del partido es Page. A los numerosos ataques que ha recibido Page ha replicado que él es un socialista típico y que él gana elecciones a la derecha, golpe duro a los que lo atacan y no han podido ganar las elecciones, como el propio Pedro Sánchez.

En su estrategia para descalificar a Page y a quienes como él se oponen a las cesiones y el entreguismo a los independentistas, los actuales dirigentes del PSOE del entorno del ‘sanchismo’ sostienen que son ideas antiguas y declaraciones de personajes que están fuera de la realidad. Aseguran también que la posición de Page es minoritaria y no la comparten la inmensa mayoría de los socialistas españoles.

No habrá medidas disciplinarias

Pese a todo y pese a que las críticas de García Page han sido constantes desde que el PSOE de Pedro Sánchez empezó su deriva con todo tipo de cesiones a los independentistas para lograr el apoyo que le permita gobernar, la dirección del PSOE no tiene intención de tomar medidas disciplinarias contra el presidente de Castilla La Mancha y secretario general en esta comunidad por sus críticas contra el partido y la Ley de Amnistía pactada con las formaciones independentistas.

No contemplan por tanto abrir un expediente a Page, según trasladan a Europa Press fuentes de Ferraz, a pesar de las declaraciones que han desatado un enfrentamiento público entre el barón socialista y los principales dirigentes del PSOE. Incluso el responsable de Organización, que ha llevado las negociaciones con Puigdemont en Bruselas, no ha hablado con el presidente de Castilla-La Mancha ni tiene intención de hacerlo.

En Fitur

Page, principal voz crítica dentro del partido contra la amnistía y los distintos acuerdos con el independentismo catalán y vasco, dio un paso más al señalar que el PSOE estaba “en el extrarradio de la Constitución, a punto de pisar la frontera constitucional” durante su visita a la feria de turismo Fitur, en la que además mantuvo un encuentro informal en los pasillos con varios presidentes del PP en la que hablaron de financiación autonómica.

Page, que llegó a comentar a los dirigentes del PP “que sufre mucho con todo lo que está pasando en su partido, habló así después de que el Gobierno accediese a acotar los delitos de terrorismo que quedan excluidos de la Ley de Amnistía para blindar a Puigdemont y evitar que entre en prisión. En este sentido señaló que “no hay terrorismo bueno y malo”.

Las palabras de Page provocaron la reacción inmediata de la cúpula socialista, que suele mantener un perfil bajo cuando se produce alguna voz discrepante al interior del partido. El secretario de Organización, Santos Cerdán, fue el primero en pronunciarse al señalar que la mayoría tiene claro lo que es el terrorismo y Page también debería saberlo.

Todo terrorismo es malo

“Todo terrorismo es malo”, sentenció García Page ante los periodistas. Y añadió: “El problema planteado por otros es, ¿qué es terrorismo? Creo que la gran mayoría lo sabemos y tú deberías saberlo”, escribió en un mensaje en X recogido por Europa Press.

Además, en esa conversación informal con varios presidentes autonómicos del PP en Fitur, Page dijo que a él están a punto de extraditarle, por sus críticas, a lo que el presidente de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón le replicó, entre risas: “Pero no pasa nada, luego te dan la amnistía”.

Nicolás Redondo y Joaquín Leguina

“Eso me dijeron el otro día en una reunión. Digo, ‘serán hijos de…'”, continuó Page, al tiempo que el presidente de Murcia, Fernando López Miras apuntó: “Tú los tienes nerviosos todo el día”. Finalmente, Page zanjó la conversación revelando su situación en el PSOE: “Yo sufro que no te imaginas. Lo que ha hecho el PSOE es de una tensión máxima. Echar a todo Dios que se le opone”.

En los últimos años el PSOE ha expulsado de sus filas al expresidente de la Comunidad de Madrid, Joaquín Leguina, en diciembre de 2022, por considerar que había pedido el voto para la candidata del PP a las elecciones de Madrid celebradas un año antes, Isabel Díaz Ayuso.

El pasado mes de septiembre expulsaron al exsecretario general del PSOE de Euskadi, Nicolás Redondo Terreros, bajo la acusación de reiterado menosprecio a las siglas del partido por sus declaraciones sobre la posibilidad de que Sánchez pactase con Junts una Ley de Amnistía para favorecer al expresidente catalán Carles Puigdemont.

Ministros contra Page

Un día después de las palabras de Page la vicepresidenta primera y vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, las rechazó al señalar que “no se corresponden con la realidad”.

Además, al ser interrogada sobre si Page sigue teniendo sitio en el PSOE, la ‘número dos’ del partido dijo que “no es bueno, no es adecuado que esa notoriedad sea a partir de estar confrontando con las estrategias del Gobierno y del partido”. A renglón seguido ha dejado la puerta abierta: “A partir de ahí cada uno tiene que hacer su propia reflexión”, ha señalado.

A las críticas de Montero y Cerdán se han sumado varios ministros socialistas como el titular de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente quien dijo que era él quien estaba en el extrarradio del PSOE. A su vez, la ministra de Igualdad, Ana Redondo, dijo que este tipo de declaraciones no favorecen ni al PSOE ni al propio Page y abogó por discutir las discrepancias “dentro del partido”.

También el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que censuró las palabras del presidente castellano manchego afirmando que el PSOE ha estado “desde el minuto 1” con la Constitución y quien le sitúe en el extrarradio de la misma desconoce la historia socialista.