Hoy: 22 de noviembre de 2024
Agentes de la Policía Nacional han llevado a cabo una operación exitosa al liberar a 24 mujeres y desmantelar una organización criminal que presuntamente las explotaba sexualmente en la isla de Mallorca. La mayoría de las mujeres, de origen latinoamericano, eran forzadas a ejercer la prostitución en pisos de citas durante 24 horas al día, seis días a la semana, viviendo en condiciones hacinadas y en entornos insalubres. Como resultado de la operación, ocho personas han sido detenidas tras seis registros domiciliarios realizados en los municipios de Inca, Alcudia y Muro.
La investigación policial se inició gracias a la denuncia presentada por una víctima de trata de seres humanos. Tras múltiples pesquisas, los agentes lograron identificar un entramado criminal de origen brasileño dedicado a la explotación sexual de mujeres vulnerables, principalmente de origen latinoamericano, en pisos de citas en diferentes localidades de la isla.
Se descubrió que la organización captaba a las víctimas a través de anuncios en internet, atrayendo a mujeres en situaciones de necesidad o vulnerabilidad tanto en España como en sus países de origen.
El grupo criminal operaba en cuatro pisos ubicados en las localidades mallorquinas de Inca, Alcudia y Muro. Las mujeres eran obligadas a trabajar en condiciones abusivas, con jornadas de 24 horas al día y solo un día de descanso a la semana. Solo tenían derecho al 50% de los ingresos obtenidos por sus servicios sexuales y eran obligadas a formalizar un contrato de subarrendamiento por 250 euros semanales, a pesar de vivir en condiciones insalubres y reducidas junto con otras mujeres.
La red desarticulada publicitaba los servicios sexuales de las víctimas en diversas páginas web de contactos sexuales, gestionando las llamadas de los clientes los propios explotadores. Además de trabajar en los pisos, las mujeres estaban obligadas a prestar servicios “escort” en domicilios de clientes o en hoteles si así lo solicitaban.
Los agentes descubrieron que la organización no solo se lucraba con la prostitución, sino que también se dedicaba a la venta de sustancias estupefacientes, principalmente cocaína. En los registros domiciliarios se incautaron 35.800 euros en efectivo, dos vehículos, ocho gramos de cocaína, cuatro gramos de cocaína rosa, cinco teléfonos móviles y documentación relacionada con la actividad ilegal.
La operación contó con la colaboración de las ONG Operation Underground Railroad (O.U.R.) y Amar Dragoste.
Esta operación se encuadra dentro del Plan de la Policía Nacional contra la Trata de Seres Humanos con Fines de Explotación Sexual. La Policía Nacional mantiene la línea telefónica 900 10 50 90 y el correo [email protected] para facilitar la colaboración ciudadana y la denuncia anónima y confidencial de este tipo de delitos, garantizando la confidencialidad de la llamada en la factura telefónica.