Hoy: 3 de diciembre de 2024
Cientos de miles de personas abarrotaron literalmente las calles de Madrid para festejar con la selección española su triunfo en la Eurocopa, que consiguió este domingo después de un campeonato brillante en el que ha ganado los siete encuentros que ha disputado y lo ha hecho frente cuatro de los países campeones del mundo.
El equipo de Luis de la Fuente se ha metido en el bolsillo y en el corazón a la afición española y una demostración ha sido la colosal fiesta en la que participaron la tarde-noche miles de personas, muchas de ellas desplazadas incluso desde diferentes puntos del país que no quisieron perderse la experiencia de arropar a los campeones.
Desde un autobús descubierto los jugadores saludaron a su paso a la multitud, emocionados al comprobar el cariño y la expectación que han despertado por un juego divertido, directo y comprometido que los ha convertido en campeones y ha enamorado al mundo.
Antes de entrar en Cibeles el autobús de la selección se detuvo en el palacio del Ayuntamiento de Madrid, donde los jugadores fueron recibidos por el alcalde en una recepción en la que se encontraba la infanta Elena.
A la plaza de la diosa, la comitiva llegó sobre las 22,30 horas. Los jugadores empezaron a salir al escenario uno a uno aclamados por el gentío, eso después de que se pusieran los goles en la pantalla gigante y escenas grabadas en los vestuarios antes y después de los partidos. Imágenes inéditas en algunos casos que los aficionados siguieron en silencio y emocionados.
En la Cibeles, lugar donde acababa el recorrido que iniciaron en la calle Princesa con paradas en la Zarzuela y Moncloa para ser recibidos por la Familia Real al completo y por el presidente del Gobierno, respectivamente, no cabía un alfiler horas antes de que tuviese lugar el acto.
El primero en salir al escenario fue el capitán Álvaro Morata, quien gritó que España es campeona de Europa, y destacó las virtudes del “mejor país del mundo”. Morata agradeció el cariño de la afición y recordó los nombres de los jugadores que pusieron el fútbol español en el mundo, desde Casilla a Iniesta. Morata hizo de maestro de ceremonias y fue llamando uno a uno a sus compañeros. Y lo hizo genial emulando al gran Reina en la celebración del Mundial.
Uno de los momentos cumbres fue cuando Morata paró las presentación de jugadores para cantar “Gibraltar es español”, que la multitud coreó. Por cierto, que cada jugador salió al escenario mientras sonaba y cantaba una canción elegida por ellos. En Inglaterra la victoria española ha picado y mucho y los estos cánticos escocerán todavía más. El “Gibraltar español” también lo coreó Rodri, al que el capitán Morata le recordó que jugaba en Inglaterra.
El avión en el que viajaban desde Berlín aterrizó a las 15,35 horas. Los primeros en bajar fueron el entrenador Luis de la Fuente, que lo hacía con el trofeo de la Eurocopa en la mano; el presidente de la Federación España de la Fútbol, Pedro Rocha, y el capitán Álvaro Morata. Tras bajar las escalerillas, jugadores y equipo técnico posaron junto al avión para los fotógrafos antes de subir al autobús en el que se iban a desplazar hasta el hotel para prepararse para su recorrido por las calles de la capital española.
Antes del paseo triunfal por Madrid, la selección acudirá a las recepciones previstas en la Moncloa y en la Zarzuela, donde les recibirán el presidente del Gobierno y miembros del Ejecutivo, y la Familia Real, con los Reyes, la princesa Leonor y la infanta Sofía.
En esta ocasión los reyes Felipe y Letizia, junto a sus hijas, Leonor y Sofía, recibían en La Zarzuela a los jugadores de la Selección para darle la enhorabuena por la maravillosa competición que han hecho.
Mostrando su apoyo incondicional a La Roja, la reina Letizia elegía para la ocasión un vestido de ese mismo color al igual que sus hijas que optaban por un look muy similar con pantalón blanco y camiseta de la selección con el dorsal número 10.
Por su parte, el rey Felipe VI recibía una camiseta de la selección de manos del capitán, Álvaro Morata, en la que se podía leer ‘reyes de Europa’. Tras el encuentro, todos posaban para la tradicional foto de familia para más tarde compartir algunas palabras de cariño y admiración junto a los Reyes y sus hijas que se mostraron de lo más cercanos y sonrientes ante este nuevo triunfo. Todas las cadenas de televisión programaron especiales informativos para seguir en directo el recorrido y la celebración en Cibeles, en especial TVE y Tele 5.
Y como se prevé que la locura y la euforia se desate, el Ayuntamiento de Madrid preparó un dispositivo de seguridad y emergencias que contará con cerca de 200 policías, 70 sanitarios y 14 ambulancias. De hecho muchos aficionados empezaron a tomar posiciones a mediodía, bajo un sol de justicia, pero cargados de felicidad. Han viajado hasta Madrid desde numerosos puntos de España porque nadie quiere perderse vivir un momento que no es frecuente.
En Cibeles, epicentro de la alegría, desde las 20 horas se encendió la gran fiesta para la afición con actuaciones musicales de primer orden y animación a cargo de un DJ. La fiesta tuvo como maestros de ceremonias a Ibai Llanos y Saúl Ramos.
A partir de ese momento, se vivieron momentos como los gritos de Balón de Oro tanto para un Dani Carvajal que salió al escenario sin camiseta como para un Rodri Hernández, al que le corearon ‘MVP’ y el popular ‘Rodri’s on fire’, o el ‘Lamine, Yamal, cada día te quiero más’ que popularizaron los Estopa en un concierto cuando salió el tímido joven extremo.
El último en salir fue el seleccionador Luis de la Fuente, que afirmó que era “un orgullo poder dirigir al grupo de jugadores y personas que son estos extraordinarios futbolistas”. “Es un orgullo para nosotros y para España contar con alguien que representa una escuela de valores como los de superación, trabajo, compañeros, generosidad o talento. Son un ejemplo para este país, sigamos así de unidos, que es como somos más fuertes”, remarcó.
El técnico riojano dejó uno de los momentos para el recuerdo cuando se atrevió junto a su amigo y excompañero en el Athletic Club Patxi Salinas a cantar ‘Quijote’ de Julio Iglesias, uno de sus cantantes preferidos.
También hubo el bonito gesto por parte de los internacionales de que estuviese en el escenario María Camaño, una niña que lucha contra la enfermedad del Sarcoma de Ewing, que tiene como ídolo a Morata y que vivió gran parte de la celebración e incluso levantó el trofeo de campeones.
Además, Miguel Merino, padre de Mikel, autor del gol que dio el triunfo ante Alemania en Stuttgart y que lo celebró del mismo modo que su progenitor, que había marcado en el mismo estadio con la camiseta de Osasuna en 1991. Ambos pudieron festejar simbólicamente el mismo tanto con dos banderines de córner.
‘La potra salvaje’, el tema ‘fetiche’ en el vestuario de la selección española durante la Eurocopa y cantado en directo por su autora, la cantante segoviana Isabel Aaiún, y el ‘We are the Champions’ pusieron el fin a la fiesta de los campeones al filo de la medianoche.
La final de la Eurocopa en la que España logró el triunfo (2-1) frente a Inglaterra en el Olímpico de Berlín obtuvo 18.939.000 espectadores únicos y 13.587.000 espectadores de audiencia media en La 1 de TVE, con una cuota de pantalla del 78,7 por ciento.
El minuto de oro se registró a las 22.49 horas, con 15.662.000 espectadores y el 83,6% de share. Así lo ha dado a conocer Barlovento Comunicación, que ha destacado que la victoria de los españoles sobre los ingleses representa la mejor cuota de pantalla de un partido de la Selección Española en competición de Eurocopa desde la final entre España e Italia, del 1 de julio de 2012 (83,4% en Telecinco), informa Europa Press. La audiencia acumulada de toda la Eurocopa (69 emisiones) fue de 35,6 millones de espectadores único, el 76,4% de la población. Ésta ha sido la Eurocopa con más cuota de pantalla en los partidos de la Selección Española desde la edición de 2012 (73,2 %).
Por sexo, la mayor cuota de pantalla en la final de la Eurocopa fue para los hombres con un 85,4% frente a la de las mujeres que fue del 72%. Asimismo, más de un 88% de los espectadores entre 13 y 44 años siguieron la final, y el 81,1% de los de 45 a 64 años. En el caso de los espectadores a partir de 64 años, la cuota de pantalla fue del 64,1%.
Por comunidades autónomas, la mayor cuota de pantalla de la final se alcanzó en Baleares con el 86,2%, seguida de Madrid (86,3%), Castilla-La Mancha (81,9%), Murcia (81,4%), Canarias (80%), Andalucía (79,8%), Aragón (79,6%), Castilla y León (79,4%), Galicia (78,3%), Comunidad Valenciana (76,8%), Cataluña (76,1%), Asturias (74,4%) y Euskadi (69,8%).