Hoy: 23 de noviembre de 2024
La exministra socialista de Vivienda, María Antonia Trujillo, ha reiterado que la reivindicación marroquí sobre Ceuta y Melilla “está plenamente justificada, está inscrita en su ideario nacional y es irrenunciable”.
Trujillo, titular del citado ministerio bajo el Gobierno del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, insiste en que “los casos de Ceuta y Melilla -y los peñones e islotes- suponen una afrenta a la integridad territorial de Marruecos” y los califica de “vestigios del pasado” que interfieren en las buenas relaciones entre España y Marruecos. Máxime, en una etapa de nuevas relaciones diplomáticas entre ambos países tras el reconocimiento por parte de España del Sáhara Occidental como provincia autónoma del reino alauita.
En declaraciones al diario digital marroquí Rue20, según recoge Confilegal y FUENTES INFORMADAS, ha afirmado que “en España no existe libertad de expresión cuando te separas del pensamiento oficial único”, en relación con las críticas recibidas por su opinión sobre las plazas de soberanía española.
“La libertad de expresión e información está más amparada en Marruecos que en España. Ya me gustaría que España tomara ejemplo de este país y no se desinformara y manipulara tanto”, ha aseverado la antigua ministra del PSOE.
Trujillo ha incidido en que se ha producido “gran malestar” en la izquierda tras el anuncio del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sobre el reconocimiento del Sáhara marroquí pero, a su juicio, “no es un error sino el gran acierto en las relaciones internacionales de nuestro país, adoptándose una decisión política que respeta la legalidad internacional”.
En esa línea, se pregunta que “si España ha cambiado su posición tradicional sobre el Sáhara, ¿por qué no puede cambiar España su posición sobre Ceuta y Melilla y los islotes y peñones?”.
La exministra, que fue cesada hace unos meses como consejera de Educación de la Embajada de España en Rabat después de críticas internas a su gestión, ha defendido que “más allá de las diferencias, Marruecos y España comparten más de lo que les separa”. Asimismo, finaliza calificando a Marruecos como “el país árabe con un régimen político y social más avanzado”.
Las ciudades autónomas tienen una vinculación con España desde hace siglos. Por una parte, Melilla fue conquistada por los Reyes Católicos en 1497. La extensión del reino español en África se produjo cuando una flota de la corona de Castilla acudió la ciudad, tras la reconquista de Granada. Su miedo era la piratería o las invasiones y buscaban asegurarse el control de puertos cercanos para repeler posibles ataques. Una empresa que llevó a cabo el entonces duque de Medina Sidonia, Juan Alonso Pérez de Guzmán.
Por su parte, Ceuta fue adquirida en primera instancia por Portugal en 1415 pasando a formar parte de la Unión Ibérica con España en 1580. Sin embargo, en el año 1640, Ceuta no siguió a Portugal en su secesión y tomó la decisión de mantenerse bajo la soberanía de Felipe IV. Aun así, su determinación fue mantener las armas de Portugal en su escudo y en su bandera.
Ya en 1656 se concede a la ciudad Carta de Naturaleza y añade el título de ‘Fidelísima’ a los que ya ostentaba de Noble y Leal. Finalmente, en 1668 el Tratado de Lisboa, rubricado entre España y Portugal, reconoce la soberanía española sobre Ceuta.