Según un nuevo estudio, los programas deportivos podrían reducir significativamente los síntomas de depresión en niños y adolescentes. En este artículo, publicado en la revista JAMA Pediatrics, han participado más de 2.400 niños y se han analizado datos de 21 estudios diferentes.
“Esta es la primera vez que hemos podido reunir suficientes estudios para que podamos llegar a una conclusión bastante buena para responder a la pregunta de si la actividad física y el ejercicio son buenos para los niños con síntomas depresivos“, ha declarado Walter Thompson, coautor del artículo y profesor jubilado de fisiología del ejercicio en la Universidad Estatal de Georgia en Atlanta. “La respuesta es abrumadoramente afirmativa”.
Incluso los datos han revelado la “dosis específica” de ejercicio que necesitan los jóvenes para obtener un mayor beneficio: alrededor de una hora de actividad física tres días a la semana.
Por tanto, estos hallazgos brindan una respuesta potencial a la crisis de salud mental que ha estado afectando a adolescentes y adultos jóvenes, a raíz de la pandemia y otros cambios sociales importantes.
Cabe recordar que la depresión es el segundo trastorno mental más común entre niños y adolescentes, y es un fuerte predictor de futuros trastornos mentales y suicidio, tal y como señalan los encargados de la investigación.
Los beneficios del ejercicio en niños
Hay varias razones por las que la actividad física podría ayudar a aliviar la depresión, según los expertos. Por ejemplo, el ejercicio libera hormonas cerebrales llamadas endorfinas que promueven una sensación de bienestar y mejoran el estado de ánimo general.
Además, la actividad física también puede hacer que un niño se sienta mejor, ya que favorece un estilo de vida más saludable y un descanso mucho más adecuado.
Este ensayo no tenía solo como objetivo evaluar la salud mental, sino también otros trastornos como la obesidad, el éxito educativo o el TDAH (trastorno por déficit de atención e hiperactividad).