Carmen Borrego respondió a estas acusaciones en el programa ‘Vamos a ver’
En lugar de detenerse en sus críticas hacia Terelu Campos y Carmen Borrego, el humorista chileno Edmundo Arrocet ha retomado sus ataques contra las hermanas Campos. Estos ataques han persistido desde poco después del fallecimiento de la querida presentadora el 5 de septiembre.
En esta ocasión, Arrocet ha concedido una entrevista telefónica exclusiva al programa Vamos a ver, donde acusa una vez más a las colaboradoras de televisión de lucrarse a su costa. “Yo nunca he recibido pago. Ellas son las que cobran diariamente. Van y les remuneran”, declara. Dirige sus críticas especialmente hacia Carmen: “A ella le interesa, si no, ¿por qué diablos la quieren allí? ¿A quién le pagan cada vez que participa en el programa? A ella le conviene porque le hacen preguntas y relata sus historias espectaculares”.
Además, Arrocet insiste en que las hijas de María Teresa apenas visitaban su hogar durante su relación, y dejó claro que “no la iban a ver cuando Teresita ya no tenía un programa de televisión. Punto”.
Revelaciones económicas y desafío a Terelu y Carmen
Bigote decide hacer un “regalo envenenado” a Terelu y Carmen. Asegura que la presentadora malagueña nunca le reembolsó el dinero prestado durante su noviazgo. No son ni 50.000 ni 30.000 dólares, como se ha especulado, sino 40.000.
A pesar de que se pensaba que María Teresa le había entregado esta suma en un momento económico complicado, Arrocet ahora afirma que se lo pidió para pagar a Hacienda, pero “Teresita nunca me lo devolvió”. “Terelu sí, pero Teresa nunca”, revela, y asegura que podría demostrarlo con un extracto bancario.
Estas afirmaciones provocaron la indignación de Carmen en el plató de Vamos a ver: “No tengo ni idea de a dónde quiere llegar este señor. La relación con mi madre terminó hace casi 5 años. ¿Por qué no abordó estos temas con mi madre en vida y solucionó lo que tenía que solucionar? No sé si ayudó a mi madre como pareja, pero lo que sé es que la que tenía que responder a estos temas. Desgraciadamente, ya no está”.
“Este señor se comporta como un indecente. Si tiene pruebas, nos veremos en un juzgado, pero ¿por qué no lo hizo con mi madre en vida? Basta ya de manipular, la mentira tiene las patitas muy cortas. No entiendo por qué no lo cuenta cuando finaliza la relación. Lo cuenta cuando mi madre, desgraciadamente, no está, y no entiendo cuál es su guerra ni lo que quiere conseguir”, concluye muy enfadada Carmen.