Hoy: 25 de noviembre de 2024
Según informa Confilegal, dos expresidentes del Club Atlético Pinto, Arcadio Fenoll Murcia y Óscar Garvín Esteban, serán juzgados en los próximos días por presuntos delitos de falsedad en documento público, sancionado en el Código Penal con condenas de hasta 3 años de cárcel y un año de multa.
La denuncia ha emanado de la propia entidad deportiva al considerar que las acciones de sus antiguos mandatarios son “lesivas para la institución”. El primer acusado fue Fenoll Murcia, contra quien se presentó una querella por supuestamente falsificar las actas de las asambleas generales del Club.
Con el fin de arrojar luz sobre el asunto, se convocó una reunión de urgencia a la que asistieron José María Garzón Flores, Eduardo Garzón García y Jesús Garzón Flores, los principales accionistas de la empresa que entonces contaban con el respaldo de la mayoría de la Junta Directiva. De Fenoll Murcia no hubo ni rastro.
A la luz de los acontecimientos, los tres peces gordos de la entidad elevaron la querella a la Audiencia Provincial del Madrid, alegando que la ausencia de Fenoll Murcia en la asamblea que debía versar sobre sus presuntos delitos constituía un agravante que podía acelerar su ingreso en prisión.
La jueza no había comunicado aún su decisión cuando se destapó que el otro presidente, Garvín Esteban, consciente de lo que podía llegar a sucederle a su colega en el cargo, trató de borrar de un plumazo la influencia de la familia Garzón Flores de la cúpula directiva.
Su plan pasaba por hacer creer al Club que en las actas de manifestación notariales existía un error flagrante por el que los tres tenores del accionariado debían ser sustituidos por otros cinco miembros, a saber: Gabriel Moya Sanz, Pablo Acosta Rivera, Francisco Medina Luna y Jesús Garrido Fernández. Estos se convertirían en socios protectores y los Garzón Flores quedarían irremediablemente relegados a un segundo plano.
Sin embargo, las víctimas de la estrategia desmantelaron las intenciones del expresidente cuanto este ya se relamía e hicieron partícipe a la jueza que se encontraba investigando el caso de Fenoll Murcia.
Ahora después de que los acusados hayan recurrido sendas inscripciones esgrimiendo documentos de actas de dos supuestas Asambleas Generales Extraordinarias, la magistrada ha interpretado que ambos son falsos y que existen, en todo el entramado, “indicios de la comisión de hechos delictivos”. Próximamente, tanto Fenoll Murcia como Garvín Esteban se sentarán en el banquillo.