Hoy: 22 de noviembre de 2024
Groundhog Day (en inglés, el Día de la Marmota) se celebra en EE.UU. y Canadá cada 2 de febrero. Es una tradición centenaria importada de Europa, utilizada por los granjeros para predecir la llegada de la primavera. Ese día coincide con la salida del animal de su hibernación.
Punxsutawney, en Pensilvania, es el lugar que protagoniza las miradas en esta costumbre. La salida de Phil, la marmota, de la madriguera predice la fecha del final del invierno. Un grupo de personas la saca de su guarida en la colina Globbler’s Knob.
Según la tradición, si Phil es capaz de ver su sombra proyectada en la nieve cuando salga de la madriguera, entonces el invierno durará seis semanas más. Esta predicción la ha hecho desde 2021 hasta 2023. En total, más de 100 veces. Si, por el contrario, no ve su silueta, pronostica que la primavera empezará antes de lo previsto.
El Día de la Marmota se celebra el 2 de febrero, considerado como la mitad del período entre el solsticio de invierno y el equinoccio de primavera. Su origen se basa en la Candelaria, una fiesta germana de mediados de invierno que, según algunas fuentes, tenía a un erizo como su meteorólogo. Otras dicen que a un tejón. Incluso, hay quienes afirman que a ambos animales. La llegada de inmigrantes de habla alemana a Pensilvania haría llegar la tradición a tierras norteamericanas.
Curiosamente, la Virgen de la Candelaria es la patrona de Canarias. Y su fiesta se celebra también el 2 de febrero, 40 días después de Navidad. Conmemora la presentación de Jesús en el templo de Jerusalén.
Respecto al Día de la Marmota, “Atrapado en el tiempo” (Grounhog Day) es la película más popular que homenajea el evento. Andy MacDowell y Bill Murray protagonizan este filme de 1993, donde el 2 de febrero se repite dentro de un bucle. Como anécdota, el actor tuvo muchos roces con el director, Harold Ramis. Especialmente, por las diferencias creativas.
Murray defendía una perspectiva más filosófica para la cinta, mientras que Ramis priorizaba lo cómico. La diferencia de opiniones entre ambos provocó que estuvieran dos décadas sin hablarse, aunque ambos se acabaron reconciliando.