Hoy: 23 de noviembre de 2024
Tres jóvenes han sido condenados a internamiento en régimen cerrado por el Juzgado de Menores número 1 de Murcia por agredir sexualmente a dos chicas de 14 y 15 años en junio de 2022 cerca de la urbanización Joven Futura. La sentencia, notificada este martes, también impone un año de libertad vigilada con contenido educativo y prohíbe la comunicación y aproximación a las víctimas a menos de 400 metros.
Los tres menores, de 17, 15 y 14 años en el momento de los hechos, obligaron a las adolescentes a subir a sus motos, las llevaron a una zona apartada y las agredieron. Estos hechos fueron reconocidos en la vista celebrada la semana pasada, donde los jóvenes aceptaron las medidas propuestas por el Ministerio Fiscal, el equipo técnico del juzgado y una de las acusaciones particulares. La segunda acusación solicitaba una duración mayor de la medida.
La sentencia, que califica los hechos como “muy graves”, subraya que las medidas en la jurisdicción de menores se basan en principios de interés del menor, reeducación, reinserción y formación personal para el retorno social, y no únicamente en la proporcionalidad del delito. Sin embargo, las medidas tienen un componente sancionador y de reproche penal, al estar por encima del mínimo legal.
La duración del internamiento varía: dos años y seis meses para uno de los menores, y dos años para los otros dos, en función de su situación personal, familiar y sociolaboral. Además, los condenados y sus padres deberán indemnizar a las víctimas con un total de 25.000 euros.
Esta resolución no es firme y cabe recurso de apelación en relación con la duración de la medida y la responsabilidad civil.
Además de las medidas impuestas, la sentencia destaca que estos casos de agresión sexual deben ser abordados con una perspectiva que priorice la rehabilitación de los menores involucrados. El magistrado señaló que, aunque los delitos son de extrema gravedad, el objetivo es reeducar y reinsertar a los jóvenes en la sociedad para prevenir futuros comportamientos delictivos. En este contexto, el contenido educativo de la libertad vigilada juega un papel crucial, proporcionando a los menores las herramientas necesarias para reflexionar sobre sus acciones y aprender conductas respetuosas y responsables.
Por otro lado, la resolución también subraya la importancia del apoyo psicológico y social tanto para las víctimas como para los agresores. El Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia ha indicado que se activarán recursos específicos para asistir a las adolescentes afectadas, asegurando que reciban el apoyo emocional y psicológico necesario para superar el trauma. Del mismo modo, se ofrecerá orientación y seguimiento a los jóvenes condenados, con el fin de garantizar que el proceso de reeducación y reinserción se lleve a cabo de manera efectiva y que puedan reorientar sus vidas hacia un futuro constructivo y libre de violencia.