Hoy: 23 de noviembre de 2024
Activistas del colectivo antiespecista València Animal Save mostraron el pasado jueves, mediante pantallas y carteles, la realidad que se esconde tras el consumo animal, en la céntrica plaza de la Virgen de Valencia. Las imágenes presentaban granjas, mataderos, laboratorios y a la industria peletera. Otros manifestantes informaban de cómo llevar un estilo de vida mediante el veganismo. Para ello repartieron un panfleto con diferentes documentales y contenido nutricional.
“Unos 3.000 animales mueren cada segundo para el consumo humano, sin contar a todos los animales marinos, por ser imposible, hasta el punto de que las redes de pesca suponen un 46% de plástico en el mar”, señala la organización.
A su vez, en la nota de prensa sobre la manifestación, València Animal Save explica que “en la industria del huevo, los pollitos machos mueren nada más nacer triturados vivos o agonizando en una bolsa de basura por no servir para la industria”. Por su parte, las gallinas son “manipuladas genéticamente viviendo en jaulas o naves industriales en las que se aplican prácticas crueles, como cortarles el pico hasta acabar en el matadero”, asegura la asociación en su comunicado. También subraya que, en el sector lácteo, los terneros mueren para que no beban la leche materna.
Mientras, a las vacas se las insemina por la fuerza, encerradas y manipuladas genéticamente, y su fin está destinado en el matadero, como en la industria cárnica. En el caso opuesto, los santuarios de animales les dan “todos los cuidados y la libertad que necesitan”, apuntan desde la organización.
Según la bióloga Rosa Más, la industria animal es insostenible tanto a nivel de crueldad como medioambiental. Además, piensa que no hay razones para estas prácticas desde el punto de vista biológico y compasivo.
Los movimientos antiespecistas defienden que el veganismo es una filosofía ética. Desde València Animal Save, aseguran que los expertos respaldan este tipo de alimentación. Y destacan que es saludable y que llega a prevenir diferentes enfermedades. Incluso, la Asociación Española de Pediatría indica que es muy saludable en la infancia, siempre que se haga de manera correcta.
El colectivo ya ha anunciado que participará en la concentración organizada por la Plataforma antitaurina de Alfafar. La manifestación tendrá lugar el 22 de abril frente al ayuntamiento de dicho pueblo valenciano. Reivindicarán el fin de los Bous al carrer, una tradición donde el toro lleva antorchas en sus cuernos, mientras anda suelto por la calle. Esta fiesta también se celebra en Cataluña. Aunque, en esta región, la tauromaquia está prohibida en las plazas dedicadas al toreo.