 
                El jurado popular ha declarado culpable por unanimidad a Dilawar Hussain, autor confeso del triple homicidio de Morata de Tajuña, cometido en diciembre de 2023. Los miembros del tribunal consideran probado que mató a Amelia, Ángeles y Pepe, tres hermanos que vivían juntos, movido por una deuda económica de 60.000 euros y que actuó “con extrema violencia”. El veredicto, leído en la Audiencia Provincial de Madrid, descarta que el acusado actuara bajo un estado de arrebato o pérdida de control.
El crimen ocurrió el 17 de diciembre de 2023, cuando Hussain, de origen pakistaní, atacó a las víctimas con una barra de hierro en su vivienda. Dos días después, regresó para intentar calcinar los cuerpos, que fueron descubiertos un mes más tarde por la Guardia Civil. El acusado se entregó el 21 de enero de 2024 en el cuartel de Arganda del Rey y confesó su autoría. “Mi cabeza no estaba bien. Escucho voces por la enfermedad que tengo y las voces me llevaron ahí”, declaró ante el jurado, alegando un trastorno mental.
El tribunal solo ha reconocido la atenuante leve de alteración psíquica, al entender que el acusado padecía un trastorno paranoide que afectaba mínimamente a sus capacidades, pero era consciente de sus actos. En consecuencia, ha rechazado las otras dos atenuantes que solicitaba la defensa: confesión y arrebato. La Fiscalía mantiene su petición de 36 años de cárcel por tres delitos de homicidio y uno de quebrantamiento de condena, mientras que la defensa ha reducido su solicitud a 30 años de prisión.
Durante el juicio, los agentes de la Guardia Civil relataron que los cuerpos fueron hallados apilados y parcialmente calcinados, y que el acusado regresó a la escena del crimen los días 18 y 19 de enero, coincidiendo con el hallazgo de los cadáveres. “Estaba viendo a ver lo que estábamos haciendo”, declaró uno de los investigadores ante el tribunal. Las pruebas telefónicas confirmaron que Hussain había realizado búsquedas en Internet sobre el crimen antes de entregarse voluntariamente.
Las víctimas eran tres hermanos muy conocidos en el municipio. Amelia y Ángeles habían sido víctimas de una estafa amorosa por parte de supuestos militares estadounidenses, que les prometieron una herencia millonaria a cambio de dinero. Perdieron más de 300.000 euros y, al quedarse sin recursos, pidieron ayuda a Hussain, quien les prestó 60.000 euros. Según la investigación, cuando las hermanas no pudieron devolver la deuda, el acusado culpó a las víctimas de su ruina y de la muerte de su madre en Pakistán.
El triple crimen de Morata de Tajuña conmocionó a la localidad madrileña por la brutalidad de los hechos y por el vínculo entre las víctimas y su agresor. “Se quedó tranquilo en la sala de espera escuchando música, colaboró y no opuso resistencia”, relató uno de los guardias civiles que lo detuvo. Con el veredicto del jurado, solo queda pendiente que la Audiencia Provincial de Madrid dicte la sentencia definitiva, que podría suponer para Hussain hasta 36 años de prisión.
 
                
             
                
             
                
            