Hoy: 22 de noviembre de 2024
Un equipo diversificado de investigadores ha lanzado un proyecto público-privado de investigación cuyo propósito primordial es agilizar el tiempo de selección del tratamiento a los individuos con cáncer de próstata desde un diagnóstico lo más precoz posible que, mediante un biomarcador, también permita determinar la agresividad de la enfermedad y la capacidad de respuesta del paciente al medicamento para administrar el mejor tratamiento disponible con la mayor prontitud concebible.
Los investigadores hacen, en este caso, un llamado a personas que voluntariamente deseen participar en el proyecto mediante la donación de muestras. El proyecto se inscribe en el ámbito de la denominada Actuación Conjunta ISCIII-CDTI (Iniciativa Transmisiones), que ha financiado acciones de I+D en las que participan empresas y centros y organismos de investigación del entorno del Sistema Nacional de Salud con el propósito de generar un resultado de aplicabilidad industrial y/o empresarial.
En el caso de esta investigación granadina, la financiación supera los 950.000 € para el proyecto y una subvención para la UGR de 512.253€ para dos años de proyecto. El proyecto, en resumen, está orientado a estratificar individuos con cáncer de próstata según su agresividad y la capacidad de respuesta a un medicamento.
En la práctica, existe un alto porcentaje de personas que responden inicialmente al tratamiento, pero paulatinamente muchos de ellos van progresando a una fase del tumor que se vuelve resistente al tratamiento, conocido como cáncer de próstata resistente a la castración (CPRC).
El CPRC precisa de otras estrategias terapéuticas que incluyen otros medicamentos o cirugía. Este tiempo de respuesta a los medicamentos es muy variado y no existe ninguna herramienta eficiente que permita distinguir a estos individuos buenos o malos respondedores, y menos aún que los clasifique según el tiempo de respuesta.
Por esta razón, el proyecto pretende utilizar nuevos biomarcadores genéticos que, junto con las variables clínicas y personales del individuo, permitan entrenar una herramienta de Inteligencia Artificial Explicable que consiga una clasificación precisa antes del inicio del tratamiento.
El desarrollo del proyecto es considerable ya que no existe un biomarcador eficaz para obtener un diagnóstico precoz y su existencia posibilitará el manejo del individuo de forma temprana. Además, solo se puede llevar a cabo si los individuos con cáncer de próstata forman parte de él.
Se necesita la participación de todos los individuos que deseen donar muestras para que sean incluidos en el estudio. El grupo ya dispone de una serie de marcadores con potencial para ser utilizados con este propósito, algunos de ellos patentados, resultado de más de 15 años de trabajo en esta línea. Pero gracias a este proyecto y a la participación de la empresa Lorgen G.P. podrán ser validados en una cohorte de más de 1.500 individuos, lo que permitirá perfeccionar la clasificación del algoritmo de decisión.