Este lunes se retomaron las obras del metro de Sevilla, 14 años después de la inauguración de la primera y única línea operativa en la capital hispalense. Dos décadas después de que comenzara la construcción, en otoño de 2003.
El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno; el alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz; y el delegado del Gobierno de España en Andalucía, Pedro Fernández, entre otros, han participado este lunes en el acto de inauguración del tramo norte de la línea 3 (Pino Montano-Prado de San Sebastián). Se prevé que este trayecto esté finalizado en 2030.
Las obras del ramal técnico, las primeras que se van a ejecutar, han sido adjudicadas por cerca de 6,4 millones de euros. Tienen un plazo de ejecución de once meses y medio. Un trazado en superficie de 650 metros, que conecta las cocheras y los talleres con la primera estación de la línea.
El tramo norte tendrá una longitud de 7,5 kilómetros, con un coste estimado en 1.366 millones de euros. De estos, 1.301 se cofinanciarán al 50% entre la Junta y el Gobierno central en virtud del acuerdo firmado. Solo Andalucía asumirá los otros 65 para la compra de los trenes.
Dicho tramo contará con doce estaciones: Pino Montano Norte, Pino Montano, Los Mares, Los Carteros, San Lázaro, Hospital Virgen Macarena, Macarena, Capuchinos, María Auxiliadora, Puerta Carmona, Jardines de Murillo y Prado de San Sebastián. Pasará por cuatro centros sanitarios: el Hospital de San Lázaro, el Macarena, el Victoria Eugenia de la Cruz Roja y el centro María Auxiliadora. También lo hará por el Virgen del Rocío y el de Valme cuando se complete la línea.
El tiempo entre Pino Montano y el Prado es de 18 minutos, con una previsión inicial de 13 millones de pasajeros al año, acompañada de una reducción de las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera de 982 toneladas anuales.