Hoy: 12 de diciembre de 2024
El vicesecretario general Institucional del PP, Esteban González Pons, ha ahondado este jueves en la causa que dinamitó las negociaciones para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) después de que el Gobierno anunciara la semana pasada la modificación del delito de sedición por un nuevo tipo penal de “desórdenes públicos agravados”. El popular aduce tres posibilidades sobre la actuación del ministro de la presidencia, Félix Bolaños: “Me mentía, le mentían a él o le desautorizaron y ninguna de las tres es buena para el Gobierno”.
En una entrevista en Antena 3, que ha recogido Europa Press, ha respondido acerca de si el Partido Popular se alegra de no haber llegado a un acuerdo con el Gobierno. “No me alegro. ¿Cómo voy a alegrarme?”, ha dicho Pons, para después reafirmar que lo lamenta, pero que “desgraciadamente” no podían hacer otra cosa más que romper las negociaciones con el Gobierno.
De este modo, ha advertido de que no se puede regenerar la justicia si el Gobierno “humilla y desautoriza” al Tribunal Supremo con la proposición de ley que pretenden presentar los socios que conforman el Ejecutivo para derogar la sedición el próximo jueves 24 de noviembre, según ha adelantado Vozpópuli, además de la eventual reforma de la malversación. La reforma se aprobará por la vía de urgencia y junto con otras votaciones como el impuesto a la banca que anunció el presidente de Gobierno, Pedro Sánchez, este verano.
El Gobierno propuso modificar el actual ilícito de sedición, penado actualmente para autoridades con 10 a 15 años de cárcel y el mismo tiempo de inhabilitación, por el de “desórdenes públicos agravados” que contendría penas de 3 a 5 años de prisión y de 6 a 8 años de inhabilitación.
Hay que recordar que el Alto Tribunal condenó a una docena de líderes del procés en 2019 por delitos de sedición y malversación. En el caso de la malversación, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y Unidas Podemos han indicado su intención de plantear una enmienda que rebaje las penas.
Así, el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, indicó que la supresión del delito de sedición se negoció “hace tiempo” con el PSOE y que esas conversaciones continúan para retocar el de malversación en lo que hace referencia al uso de dinero público para esas protestas, pero no a prácticas de corrupción. Ni el PSOE ni el Gobierno han confirmado esas conversaciones por el momento. Rufián apostó por medidas “quirúrquicas” porque “esa es la clave”. Sánchez ha manifestado que sigue abierto a cambiar la malversación pero ha pedido esperar a la tramitación de enmiendas y en qué se acaba concretando.
A continuación, el dirigente del PP ha subrayado que el TS tiene un veinte por ciento de bajas y que “está necesitando, más ahora con el trabajo que le viene encima, recuperar las plazas que tiene vacantes”. “El Consejo necesita ser renovado y necesitamos un Tribunal Constitucional en el que todos podamos confiar”, ha agregado.
Por último, ha hecho hincapié en que no podían llegar a un pacto para reformar la justicia porque “no había solo nombres encima de la mesa, sino también un proyecto de Ley Orgánica del Poder Judicial y un proyecto de nuevo estatuto fiscal que despolitizaba la figura del Fiscal General del Estado”. “Todo eso yo habría querido que saliera”, ha zanjado.