Debido a los anuncios de determinados influencers, el fármaco Ozempic no se encuentra disponible en las farmacias, haciendo que los pacientes diabéticos tengan que buscar alternativas más caras
Una nueva moda, que llega de mano de los influencers, provoca un desabastecimiento en las farmacias de un medicamento recetado a diabéticos. El fármaco en cuestión se trata del Ozempic y consiste en un inyectable que ayuda al cuerpo a reducir el nivel de azúcar en sangre. Este está indicado para pacientes con diabetes tipo 2, a los que ni la dieta ni el ejercicio les son suficientes para controlar los niveles de azúcar.
Sin embargo, en redes sociales se ha difundido la idea de que este fármaco puede provocar una pérdida de peso fácil y rápida, por lo que esto ha derivado en la rotura de su stock en gran parte de las farmacias españolas.
En los últimos tiempos, este medicamento se ha prescrito por endocrinos de la sanidad privada para ayudar a bajar de peso a ciertos pacientes, lo que ha repercutido en la utilidad que tiene en la sanidad pública (y para el que es su cometido principal) para el control de los niveles de azúcar. Afortunadamente, existen otras alternativas de tratamiento de este tipo para los diabéticos, aunque en algunos casos, supone un mayor desembolso de dinero al no estar financiados.
Dada la situación, la Agencia Española del Medicamento ha pedido que este medicamento se priorice únicamente para los enfermos de diabetes. Además, varios usuarios se han quejado de que prime el nivel adquisitivo del paciente para poder acceder al tratamiento, ya que este está financiado en la sanidad pública, pero se puede adquirir con una receta fácilmente de la privada, lo que favorece su baja disponibilidad.
Una vez más, los anuncios de los influencers por las redes sociales ponen en peligro a pacientes y usuarios en general (incluidos menores de edad) que creen sus “recomendaciones”. En este caso concreto, el Ozempic es un fármaco indicado para personas diabéticas con sobrepeso y requiere de un seguimiento médico estricto. Por ello, no se puede abusar de él y menos personas que se encuentren en un peso normal o menores de 18 años, ya que podría conllevar graves efectos secundarios como problemas oculares, páncreas inflamado o reacciones alérgicas.