Miguel Ríos, pionero del rock español, ha vuelto otra vez a los escenarios, con su nuevo espectáculo, El último vals. A sus 82 años, el infatigable cantante granadino de Bienvenidos o Lua Lua Lua sigue llenando auditorios en su nueva gira, en la que fusiona rock y country.
El pistoletazo de salida de su tourne fue el pasado 7 de noviembre en el Festival Arena Negra de Fuerteventura. Un éxito total, más de 17.000 personas fueron testigos de cómo Miguel Río sigue fiel a sus raíces y a sus fans, y viceversa.
En los próximos meses se dejará ver por distintos puntos de España, entre ellos, Murcia, Albacete, Palma de Mallorca, Madrid y Tarragona, donde empiezan a agotarse las entradas nada más salir a la venta.
El que parece el definitivo adiós de este infatigable artista granadino promete ser un espectáculo lleno de luz y emociones. Se podrán escuchar sus grandes éxitos, como Bienvenidos, Santa Lucía y su mundialmente conocido Himno de la Alegría, junto a nuevos singles cargados de la esencia más pura de Miguel Ríos.
Su gira El último vals no es solo un espectáculo, sino la celebración de una carrera honesta que ha resistido las modas y recuerda cómo se forja una auténtica leyenda, integridad y talento.
Los fans del cantante podrán irse con un gran sabor de boca y es que, ver a tu ídolo finalizar su trayectoria musical por todo lo alto, no tiene precio.
¿Cómo logra un artista musical mover a una multitud de fans a lo largo del tiempo? Desde sus inicios en los sesenta, ha sabido hacer lo más difícil: reinventarse sin traicionar sus raíces más profundas.
Hoy, la industria musical parece valorar más la cantidad que la calidad, donde los hits se consumen y se olvidan con la misma velocidad, y donde las letras a menudo se reducen a la exaltación superficial.
En los tiempos que corren, cualquiera puede cantar, pero no cualquiera puede permanecer en el tiempo, indeleble, como el granadino.
Miguel Ríos es un recordatorio de que la música, en su mejor expresión, requiere estilo, una voz única y, fundamentalmente, algo que decir.
Él es, por mérito propio, el referente y pionero indiscutible del rock español, un artista capaz de mover multitudes año tras año sin perder su esencia. Y sus fans lo saben y por eso quieren saborearlo hasta el final.