Unos 1.200 internos se encuentran afectados por las protestas, ya que no pueden salir de sus celdas por falta de personal
Un centenar de funcionarios, según los sindicatos, continúan cortando el acceso a varias prisiones de Barcelona por el fallecimiento de una cocinera este miércoles en la cárcel tarraconense Mas d’Enric, en El Catllar, aparentemente a manos de un recluso que posteriormente se quitó la vida.
Los funcionarios han cortado el acceso a la prisión de Quatre Camins y Joves este sábado desde las 05.30, y unas 20 personas lo han hecho ante la cárcel de mujeres de Barcelona Wad-Ras.
Fuentes sindicales explican a Europa Press que en Wad-Ras han permitido el acceso al equipo de cocina y enfermería, mientras que en Quatre Camins los cortes no han permitido el cambio de turno de noche y los funcionarios no han podido acceder al centro a sustituir a sus compañeros.
Los sindicatos exigen responsabilidad a la Conselleria de Justicia, Derechos y Memoria de la Generalitat ante “la escalada de violencia en los centros”, y avisan de que mantendrán los cortes durante toda la jornada de este sábado.
Además, las mismas fuentes acusan a la dirección del centro de Quatre Camins por “insultos y amenazas” a los funcionarios desde que empezaron las protestas, y piden el cese de su puesto.
También han señalado que desde la prisión se han pedido refuerzos por un supuesto incidente en el interior, que los protestantes aseguran que ha sido una “invención” para intentar disuadir las protestas.
1200 presos afectados
Por su parte, unos 1.200 presos catalanes se encuentran afectados este sábado en Cataluña por estas protestas, ya que no pueden salir de sus celdas por falta de personal durante las movilizaciones, aunque se ha levantado el bloqueo del viernes en la mayoría de centros.
En Quatre Camins no se han llegado a abrir las celdas este sábado; en Wad-Ras hay 100 mujeres que no puede salir de sus celdas desde el jueves por la noche; y en la de Jóvenes funcionan dos módulos pero otros dos no han podido abrir con normalidad.