La NASA ha identificado hasta 13 regiones de la Luna donde sería posible un futuro alunizaje del ser humano, según han informado la propia agencia espacial estadounidense.
“La selección de estas regiones significa que estamos un paso gigantesco más cerca de volver a llevar a seres humanos a la Luna por primera vez desde el programa Apolo”, ha apuntado el administrador adjunto de la División de Desarrollo de la Campaña Artemis, Mark Kirasich.
El programa ‘Artemis’ es el proyecto de la NASA para llevar de nuevo al ser humano al satélite de la Tierra y la primera misión con tripulación que se prepara, que llevará por nombre Artemis III, en el que viajará la primera mujer en pisar la Luna.
Kirasich ha apuntado que, cuando esto suceda, “será una misión diferente a cualquiera anterior, ya que los astronautas se aventurarán en zonas oscuras previamente inexploradas por los humanos y sentarán las bases para futuras estancias de larga duración”.
Sobre las regiones localizadas, se trata de Borde Faustini A; Pico cerca de Shackleton; Cresta de conexión; Extensión de la cresta de conexión; Borde de Gerlache 1; Borde de Gerlache 2; Macizo de Gerlache-Kocher; Haworth; Macizo de Malapert; Meseta Leibnitz Beta; Borde Nobile 1; Borde Nobile 2; y Borde de Amundsen.
Tal y como ha informado la NASA, todas ellas se encuentra a menos de seis grados del polo sur lunar y, colectivamente, contienen diversas características geológicas.
Además, ha indicado que estas regiones ofrecen opciones de alunizaje para todas las potenciales oportunidades de lanzamiento de Artemis III y ha explicado que los lugares de alunizaje específicos están estrechamente ligados al calendario de la ventana de lanzamiento, por lo que disponer de múltiples regiones garantiza flexibilidad para el lanzamiento durante todo el año.
Para seleccionar las regiones, un equipo de científicos e ingenieros de la agencia evaluó la zona cercana al polo sur de la Luna utilizando datos del Orbitador de Reconocimiento Lunar de la NASA, así como décadas de publicaciones y hallazgos científicos lunares.
Del mismo modo, se tuvo en cuenta la disponibilidad de ventanas de lanzamiento. En concreto, según ha indicado la agencia estadounidense, el equipo evaluó las regiones en función de su capacidad para permitir un aterrizaje seguro, utilizando criterios como la pendiente del terreno, la facilidad de comunicación con la Tierra y las condiciones de iluminación.
Además, los expertos también han valorado su accesibilidad y las capacidades combinadas del cohete Sistema de Lanzamiento Espacial, la nave espacial Orion y el sistema de aterrizaje humano Starship proporcionado por Space-X.
“Varios de los lugares propuestos en estas regiones se encuentran ubicados en algunas de las partes más antiguas de la Luna y, junto con las regiones permanentemente a la sombra, ofrecen la oportunidad de aprender sobre la historia de la Luna mediante materiales lunares no estudiados previamente”, ha explicado la jefa de ciencia lunar de Artemis, Sarah Noble.
Tras estas identificaciones, la NASA analizará las 13 regiones con la comunidad científica y de ingeniería en general y seleccionará los emplazamientos para Artemis III tras determinar las fechas de lanzamiento de la misión, que determinarán las trayectorias de transferencia y las condiciones ambientales de la superficie.