Un caso insólito ha sacudido al Poder Judicial en San Isidro (Buenos Aires, Argentina), justo en el marco del juicio por la muerte de Diego Armando Maradona. En el centro de la polémica se encuentra la jueza Julieta Makintach, integrante del Tribunal Oral en lo Criminal N.º 3, a quien se investiga por la presunta grabación de un documental o contenido audiovisual durante las audiencias, con un enfoque centrado exclusivamente en ella.
Según la investigación en curso, se sospecha que en medio del proceso judicial más mediático del país se habría estado registrando material para un documental, entrevista o incluso un reality show cuyo protagonista no sería el caso Maradona, sino la propia magistrada, según informa Clarín.
Hasta hace poco desconocida para la opinión pública, Makintach reside en Boulogne, partido de San Isidro, y se caracteriza por mantener una presencia activa en redes sociales. Allí comparte imágenes personales, incluso en traje de baño o posando de forma más estilizada. Esto ha generado sorpresa, especialmente en un distrito tradicional como San Isidro y siendo hija del juez Juan Makintach, una figura de largo recorrido en ese departamento judicial. También es hermana de Juan Makintach (h), vinculado a la productora Pegsa, inicialmente señalada como posible responsable de las grabaciones.
Makintach es licenciada en Derecho Penal y se desempeña como profesora en la Universidad Austral. Está casada, es madre de dos hijos y suele participar en entrevistas, ciclos y charlas donde aborda temas judiciales. Hace dos meses escribió en LinkedIn celebrando sus ocho años como “JUEZA PENAL”, y 25 desde que comenzó su carrera judicial.
“Creo que tener la posibilidad de decir el derecho en un camino que busca la verdad para dar a cada uno lo suyo, es un privilegio que me llena de orgullo”, escribió la magistrada. También destacó su compromiso con todas las partes del proceso judicial: “En la VÍCTIMA reparando su dolor. En el IMPUTADO con la sanción proporcional a la gravedad del delito cometido. Y en la SOCIEDAD rindiendo cuentas de lo que espera del ejercicio del PODER, JUDICIAL.”
En otro vídeo reciente, compartido en redes sociales, Makintach habla sobre juzgar con perspectiva de género en el ciclo Mujeres en Derecho:
“Siempre mantuvimos este postulado de que son todos inocentes hasta que encontremos un montón de prueba que me acredite por fuera de toda duda de que es un culpable”, afirma.
Luego añade: “Cuando viene la perspectiva de género y todos estos femicidios que aparecen en la tapa de los diarios y los noticieros la gente empieza como a ponerse muy nerviosa y además, con derecho, a reclamar justicia. A reclamar justicia porque responde a una necesidad social de un reclamo que muestra que cada 36 horas muere una mujer y que una de 3 mujeres vivió algún tipo de violencia física o sexual en su vida.”
“Hay datos de estadísticas que nos están mostrando que cada vez hay más violencia de género en la sociedad o la estamos aprendiendo a detectar con mayor facilidad y que está pidiendo del Estado una respuesta rápida. Está pidiendo de la política criminal que adopte los medios para darnos una respuesta eficaz como sociedad.”
Makintach lleva 27 años en el Poder Judicial. Ingresó en 1998 al Juzgado de Transición Nº 4 y más tarde trabajó en la secretaría del Juzgado de Garantías Nº 3 de San Isidro. Desde 2017 ejerce como jueza del TOC Nº 2 en el mismo distrito judicial. Además, es magíster en Derecho Penal y coach ontológica.