El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, debe tener claves secretas y datos que yo desconozco para bendecir el pacto del presidente valenciano, Carlos Mazón, con el partido de Abascal, para renovar el gobierno de la comunidad y quedarse tan a gusto. O maneja hechos, sensaciones, sondeos e intenciones que nadie conoce más que él, o ha pifiado su estrategia, una más en los últimos tiempos. Y van unas cuantas.
El acuerdo entre el PP valenciano y Vox para reeditar el Gobierno ha pillado por sorpresa al personal. Cuando todos achuchaban a Feijóo para que ‘despidiese’ a su presidente y se alejase de él para no acabar quemado, Mazón da un giro inesperado al guion y afianza su continuidad asumiendo, además, los postulados de Vox en materias tan sensibles como inmigración o el Pacto Verde.
El problema es que Feijóo sale a los medios y dice que respalda el pacto porque además se hace con planteamientos «consecuentes» con las posiciones que defiende el partido, que de entrada no es verdad ni en materia de medio ambiente ni de migraciones.
Me temo, y es mi modestísima opinión, que el líder Feijóo se ha equivocado y lo ha hecho no tanto por bendecir un acuerdo con Vox, que también y sobre todo después de su peligrosa escalada trumpista en contra, incluso, de los intereses de España, como por apoyar la continuidad de Mazón, un político absolutamente amortizado por la sociedad valenciana por su nefasta gestión de la dana, y su decisión de mantenerse en el cargo después de cuatro multitudinarias manifestaciones contra él.
En la política suceden cosas muy raras y no hay más que ver lo ocurrido en Estados Unidos con Trump, pero ¿cree de verdad Feijóo que el PP tiene opciones de mantenerse en el poder de la Comunidad con Mazón a la cabeza? ¿Es posible que su mala imagen se lleve por delante la del PP en la comunidad y de paso la suya como líder de la oposición? ¿No ha pensado Feijóo en lavar la cara de su partido y hacer olvidar todo lo que tiene que ver con Mazón para mantener el respeto y el favor del electorado valenciano desautorizando claramente su gestión y obligarlo a salir del partido?
Quizás, repito, Feijóo maneje informaciones que yo desconozco, pero mi opinión es que Mazón es un lastre para la imagen del partido y para la credibilidad y el liderazgo de su presidente. Si como parece acaba imputado en el proceso que se sigue, ¿cómo va a pedir el PP explicaciones al Gobierno en asuntos de gestión o corrupción si está atado al futuro de un dirigente autonómico que ha elegido seguir cuando todo el mundo le he pedido que se vaya. O casi todo el mundo.
Feijóo sabrá lo que hace. O quizás no, y ese es el problema porque empieza a tener demasiados desajustes políticos en enfoques y estrategias.