Hoy: 23 de noviembre de 2024
Anna-Mae Bullock, más conocida como Tina Turner, ha fallecido este miércoles a los 83 años por una enfermedad en su casa de Küsnacht, Suiza. Lugar en el que vivía desde 1992. Nacida el 26 de noviembre de 1939 en Nutbush, Tennesse, comenzó su carrera en la década de los 50 en el R&B (rythm’n’blues) junto a su marido, Ike Turner.
Aunque con Ike triunfó en el escenario, su vida privada con él acabó en pesadilla. Era adicto a las drogas y la pegaba. Hasta el punto de que llegó a dejarle moratones y romperle la mandíbula. Tras 16 años, Tina lo abandonó.
El mayor reconocimiento de la diva en la música empieza como solista en los años 80, en la masculinizada escena del rock, donde dejó su impronta con canciones míticas como We Don’t Need Another Hero y The Best.
De hecho, en 1984 sacó su primer álbum como solista titulado Private Dancer. Ganó tres premios Grammy, entre ellos, la mejor interpretación vocal femenina por What’s Love Got to Do with It. Además, vendió 20 millones de discos.
En medio de esos éxitos musicales, Turner ingresó en el Salón de la Fama del Rock and Roll en 1991 por su trabajo en The Kings of Rhythm. Y como solista volvió a ingresar en este olimpo de los músicos en 2021.
También estuvo involucrada en el mundo del cine con películas como ‘Tommy’, ‘Mad Max Beyond Thunderdome’ y ‘Last Action Hero’.
Hoy en Barcelona, dentro de su gira mundial, Coldplay le ha dedicado su primer concierto a Turner de los cuatro que dará en la Ciudad Condal.
En 2016, a Turner se le diagnosticó un cáncer intestinal, lo que terminó por afectarle directamente a los riñones, que no trabajaban correctamente. Por eso, la cantante se sometió a un trasplante en 2017. Sin embargo, antes de esta operación, se planteó la eutanasia.
En su autobiografía, My Love Story, describe cómo el cáncer la dejó casi paralizada, sin poder caminar o alimentarse por sí misma.
Con pocas esperanzas, la reina del rock se inscribió en la lista de espera de Exit, que da apoyo a procesos de eutanasia en Suiza. Pero el amor que sentía hacia su esposo, Erwin Bach, hizo que se arrepintiera. Otro episodio duro de su vida de la que consiguió salir por su fortaleza. Al igual que en otras ocasiones, donde sufrió desde enfermedades hasta la violencia machista.