Hoy: 9 de diciembre de 2024
Su Majestad el Rey Felipe VI ha presidido junto al presidente del Gobierno, Pedro Sanchez, el homenaje de Estado a Miguel Ángel Blanco celebrado en Ermua este domingo, cuando se cumplen 25 años de su asesinato a manos de ETA; junto al Lehendakari, Íñigo Urkullu; la presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet; y el alcalde de Ermua, Juan Carlos Abascal.
“Debemos seguir empeñados en la memoria, en el recuerdo, en el afecto hacía las víctimas, porque parte de nuestra dignidad como sociedad se la debemos a todas ellas”, ha subrayado el presidente del Gobierno. “La paz nos ha costado mucho dolor. Ojalá ese dolor se transforme definitivamente en una conciencia colectiva indestructible que nos proteja siempre, siempre, siempre de la violencia”, ha defendido.
El jefe del Ejecutivo ha recordado que hace veinticinco años, el cruel asesinato de Miguel Ángel Blanco fijó una fecha fundamental en nuestra democracia, y desde entonces, fuimos un país distinto que nunca más se doblegaría ante el terror. “El espíritu de Ermua que nació entonces es el espíritu de la unidad y de la paz, de la convivencia y la concordia”, ha afirmado.
En octubre se cumplió el décimo aniversario del final del terrorismo en nuestro país, y el presidente del Gobierno ha reafirmado que si hoy Euskadi y España son países libres y en paz, es gracias a todos los que apostaron por la unidad de los partidos frente al terror y el odio, a la labor de la justicia, a la imprescindible colaboración internacional, al valioso y valiente trabajo de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, a la Ertzaintza y, por supuesto, a la sociedad de Euskadi y de España.
“Necesitamos que la sociedad no olvide”, dijo, y para ello el jefe del Ejecutivo ha apelado al esfuerzo de todos, desde las organizaciones de la sociedad civil, hasta la inclusión de la Memoria en la educación, para acercarla a los jóvenes que no conocen esa etapa. También ha destacado la importancia de iniciativas como el Museo Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo, en Vitoria, para mantener la memoria de Miguel Ángel y la memoria de todas las víctimas.