La Guardia Civil ha desarticulado una “secta destructiva” en Escatrón (Zaragoza), arrestando al líder y a sus colaboradores en el marco de la operación Mileniocat. Esta secta, denominada EVOL, se presentaba como una asociación legítima que ofrecía talleres de autoconocimiento y crecimiento personal. Sin embargo, tras recibir denuncias de víctimas en Barcelona, las autoridades descubrieron que el líder utilizaba técnicas de manipulación psicológica y agresiones físicas para controlar y explotar económicamente a sus seguidores.
El líder de EVOL promovía un discurso catastrofista, asegurando que la sociedad desaparecería en 2027 y que solo él podía salvar a sus miembros. Este mensaje fomentaba el aislamiento de los adeptos del mundo exterior, al que describía como corrupto y enfermo. Principalmente mujeres, las víctimas sufrían agresiones, vejaciones y amenazas. Eran obligadas a romper sus relaciones externas y a convivir en una comunidad bajo el control absoluto del líder.
La secta se estableció en 2018 en un lugar aislado de Escatrón, Zaragoza. Durante los talleres, el líder y sus colaboradores captaban a las víctimas y las inducían a cortar lazos con sus familias y amigos, creando una dependencia total hacia él. Además, obtenían beneficios económicos que utilizaban para mejorar sus instalaciones y organizar nuevos talleres para atraer a más personas.
En la fase de explotación de la operación, la Guardia Civil detuvo a cuatro personas y se incautó de documentos que evidencian el proceso de captación y manipulación. La investigación, dirigida por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Único de Caspe, fue realizada por la Sección de Información de la Zona de Cataluña, en colaboración con la Comandancia de Zaragoza y otras unidades especializadas. Las autoridades no descartan que el número de víctimas aumente a medida que avance la investigación, ya que podrían existir más afectados que no han denunciado por miedo o temor.