El prófugo se había hecho con una identidad falsa para evadir a las autoridades y empleaba estrictas medidas de seguridad para evitar su localización
En una operación llevada a cabo por agentes de la Policía Nacional en Marbella el pasado 23 de abril, se ha logrado la detención de uno de los fugitivos más peligrosos de Polonia. Este individuo, cuya identidad no ha sido revelada por razones de seguridad, está presuntamente implicado en una serie de delitos graves, incluyendo el tráfico ilícito de drogas, el tráfico de armas y explosivos, así como la pertenencia a una organización criminal. Las autoridades polacas lo buscaban por estos crímenes, y enfrenta una posible condena de más de 50 años de prisión.
La investigación que llevó a su captura se inició a finales del año anterior, cuando las autoridades policiales de Polonia solicitaron la colaboración de las fuerzas del orden españolas. Se sabía que el fugitivo se había hecho con una identidad falsa para evadir a las autoridades, y que empleaba estrictas medidas de seguridad para evitar su localización.
Las autoridades españolas, en colaboración con sus homólogos polacos, comenzaron a rastrear al prófugo, identificado como uno de los criminales más buscados y peligrosos del país europeo. Se le vinculaba estrechamente con el tráfico ilegal de drogas y armas, habiéndosele incautado en Polonia un fusil de asalto Kalashnikov y un fusil de ánima lisa, conocido como “bomba”.
La peligrosidad del individuo llevó a los investigadores a extremar las precauciones. Se tenía conocimiento de que había alterado su apariencia física, llegando incluso a eliminar tatuajes para dificultar su identificación. Además, se movía constantemente de domicilio, vehículos e incluso de ciudad para eludir a las autoridades.
Lograron ubicar al fugitivo en Marbella
Después de meses de seguimiento e inteligencia, las fuerzas del orden lograron ubicar al fugitivo en Marbella, donde había establecido una nueva identidad falsa. Un meticuloso dispositivo de vigilancia permitió su arresto en plena vía pública mientras se disponía a realizar gestiones fuera de su domicilio.
Esta operación fue posible gracias a la colaboración y la financiación de la Unión Europea, específicamente a través del Fondo de Seguridad Interior. La estrategia de seguridad europea se enfoca en preparar un entorno seguro para el futuro, combatir las amenazas emergentes, proteger a los ciudadanos del terrorismo y la delincuencia organizada, y fortalecer el ecosistema de seguridad europeo.
La Dirección General de Migración y Asuntos de Interior de la Comisión Europea (DG HOME) junto con las agencias de la UE y fondos específicos como el ISF, han respaldado esta operación, que forma parte de los esfuerzos conjuntos de los Estados miembros para desmantelar las redes criminales y proteger la seguridad de los ciudadanos de la Unión Europea.