Agentes de la Policía Nacional han desmantelado un grupo criminal que se dedicaba a estafar mediante la venta de citas falsas para trámites de extranjería. Los dos detenidos, de nacionalidad argentina, utilizaban un bot informático para bloquear el sistema de citas online de extranjería, acaparando la mayoría de las citas disponibles para luego venderlas. Estas citas, que abarcan casi todas las provincias de España, eran ofrecidas a través de una aplicación de mensajería instantánea y una conocida red social, a un precio de entre 50 y 90 euros, a pesar de que el trámite es gratuito. Durante el registro en un municipio de Valencia, los agentes confiscaron 7.290 euros en efectivo, varios dispositivos electrónicos usados en la operación, y documentación detallada de la venta de citas.
La investigación comenzó tras recibir varias denuncias de ciudadanos extranjeros que indicaban haber sido víctimas de una estafa relacionada con la venta de citas para trámites de extranjería. En todos los casos, las personas afectadas pagaron por una cita que posteriormente resultó inexistente, generando la alarma y el inicio de las pesquisas policiales.
Los detenidos utilizaban un bot informático que detectaba la disponibilidad de las citas en el sistema de extranjería y las acaparaba de forma automática. Luego, ofrecían las citas a través de aplicaciones de mensajería y redes sociales. Uno de los arrestados actuaba como intermediario, facilitando un número de teléfono a las víctimas interesadas, con quienes concretaba las condiciones de pago, la fecha y el lugar de la cita a través de mensajes instantáneos.
El pago, que no bajaba de los 50 euros, se realizaba mediante transferencia bancaria. Una vez recibido el dinero, las víctimas recibían una confirmación de cita, pero al acudir a las oficinas de extranjería, descubrían que la cita no existía, habiendo sido engañadas en un trámite que debía ser gratuito.
Las autoridades han detenido a dos personas en Valencia, identificando a más de un centenar de víctimas en toda España. Las víctimas, en su mayoría extranjeros que necesitaban realizar trámites urgentes como solicitudes de protección internacional, huellas para el N.I.E. o certificados de la Unión Europea, se vieron obligadas a pagar por la dificultad de conseguir citas a través de los canales oficiales. La investigación sigue abierta, y no se descartan nuevas detenciones en relación con esta red de estafadores.