Hoy: 22 de noviembre de 2024
Viajar siempre es un buen plan y, aunque la mayoría siempre apuntamos por viajar en el extranjero hay veces que mirar hacia dentro es la opción adecuada pues España ofrece una gran variedad de destinos. Aquí te presentamos cuatro opciones, algunas más conocidas que otras, para ayudarte a planear tus viajes (nacionales) de este año.
Que sea la primera opción de nuestra lista tal vez sorprenda a pocos. Tenerife es uno de los destinos predilectos, tanto para los españoles como para turistas internacionales, ya que sin importar cuando viajes siempre hará calor (aunque por la noche te aconsejamos tener una chaquetita a mano).
Además del buen tiempo, ofrece opciones para todos los gustos: desde un chapuzón en el Atlántico hasta contemplar las estrellas desde la cima del Monte Teide o descubrir los pueblos y playas de la isla. Su variado paisaje incluye bosques, desiertos, valles y barrancos y además es uno de los mejores destinos de Europa para los entusiastas del ciclismo.
La capital de provincia tal vez no sea uno de los destinos más populares del territorio español, sin embargo se corona como la ciudad europea con más edificios románicos. Aunque Zamora ofrece más que solo edificios románicos, ya que posee un enorme legado de estructuras modernistas de finales del siglo XIX y principios del XX y muchas opciones en sus alrededores para aquellos que disfrutan del turismo ecológico, como por ejemplo las Lagunas de Villafáfila (una delicia para los observadores de aves) o la Sierra de la Culebra que tiene la mayor población de lobos de Europa Occidental.
Además, al sur de Zamora, los Arribes del Duero se está llenando de proyectos gastronómicos y hoteleros que junto a su paisaje lleno de olivos y cítricos apuntan a que la zona se convierta en la ‘Toscana de España’.
Si vives en la capital y buscas un destino cercano, Zamora es la opción perfecta pues se encuentra a menos de una hora en el nuevo tren de alta velocidad.
A tan solo 35 al suroeste de Bilbao, Las Encartaciones es un rincón rico y sorprendente de la provincia de Vizcaya que ofrece opciones tanto para los más aventureros como para los más sibaritas.
La zona ofrece amplias oportunidades para excursionistas y ciclistas y, para aquellos que disfrutan de la historia, la oportunidad de visitar las antiguas y lujosas Casas Indianas de los españoles que fueron a hacer fortuna a Las Américas durante el siglo XIX o pasarte por el museo La Enkartada (una antigua fabrica de boinas) que refleja el pasado industrial de la provincia.
Para los más sibaritas, recomendamos visitar Casa Garras. Lo carnívoros disfrutarán especialmente de sus “días de la carne de res”, que tienen lugar durante los meses de invierno, cuando el restaurante sirve un menú de degustación de carne de 11 platos con deliciosas creaciones como el tartar de bistec de rabadilla con médula asada. Además, es un imperativo probar el Txacolí, un vino blanco espumoso autóctono.
La ciudad andaluza te invita a adentrarte, con un brindis, en su rico pasado histórico marcado por fenicios, romanos, musulmanes y cristianos.
En Jerez de la Frontera es imprescindible dejarte perder por su centro histórico, admirando como palacios y casas lujosas se alternan con edificios religiosos como la catedral y una mezquita de finales del siglo XII dentro del Alcázar de la ciudad y, después de tanto pasear, puedes saciar la sed en abundantes tabernas y bodegas que son hogar el vino (denominación de origen) de renombre internacional.
Las oportunidades para viajar a Jerez de la Frontera son amplias, dados la multitud de ferias y festivales que alberga como La Feria del Caballo, el Festival de Flamenco, el Festival de la Cosecha o el Gran Premio de la Motocicleta. Sin embargo, aunque tu visita no coincida con ninguna feria, una escusa perfecta para visitar la ciudad es la inauguración del Museo de Lola Flores en celebración del centenario de su nacimiento en la ciudad andaluza.