El incremento de casos de gonorrea ha llevado a poner en marcha nuevas medidas de prevención. Mientras Inglaterra inició en agosto un programa de vacunación rutinaria, Galicia se adelantó un mes y comenzó a aplicar la vacuna 4CMenB, originalmente diseñada contra la meningitis B, pero que ha demostrado eficacia en la reducción de contagios de esta infección de transmisión sexual (ITS).
La preocupación es creciente, ya que la gonorrea se ha convertido en la ITS con mayor número de nuevos casos en España. En 2023 se registraron 34.401 contagios, lo que supone un aumento del 42,6% respecto a 2021. A este escenario se suma la aparición de cepas resistentes a los tratamientos habituales, lo que refuerza la necesidad de nuevas herramientas como la vacunación.
En Galicia, la Xunta ha diseñado un plan que incluye a personas de entre 18 y 65 años que cumplan ciertos criterios: haber sido diagnosticados recientemente de una ITS como clamidia, gonorrea o VIH, tener antecedentes de dos o más ITS en los últimos cinco años, haber tenido conductas de riesgo en el último año o haber recibido profilaxis frente al VIH en varias ocasiones. La vacuna se administra en dos dosis con un intervalo de al menos dos meses. Aunque de momento es una medida exclusiva de Galicia, no se descarta su extensión al resto de España si se confirman buenos resultados.
La gonorrea es causada por bacterias que proliferan en zonas cálidas y húmedas del cuerpo, y se transmite a través de cualquier tipo de práctica sexual. Puede afectar la uretra, el aparato reproductor femenino, el recto, la garganta, la boca y los ojos. En algunos casos no produce síntomas, lo que incrementa el riesgo de contagio y de complicaciones graves si no se trata a tiempo.
Los síntomas varían según el sexo y la zona afectada. En los hombres suelen incluir dolor o ardor al orinar, secreciones similares al pus y testículos inflamados, mientras que en las mujeres son frecuentes el dolor abdominal intenso, secreciones vaginales anormales, sangrado fuera de lo habitual y fiebre.
También puede presentarse en el recto con secreciones y sangrado, en los ojos con dolor y sensibilidad a la luz, o en las articulaciones causando hinchazón y dolor. Mientras la vacuna comienza a abrirse camino, los expertos recuerdan que el uso del preservativo sigue siendo la forma más eficaz de prevención.