La casa de don Vicente

6 de agosto de 2023
1 minuto de lectura
En el número tres de la antigua calle Velintonia, vivió, sintió, sufrió, escribió y amó, con discretas intensidades.
Vicente Aleixandre. | Fuente: Flickr

En el número tres de la antigua calle Velintonia, vivió, sintió, sufrió, escribió y amó, con discretas intensidades, el indiscutible Vicente Aleixandre.

A su quietud tuberculosa llegaban cada día los sonidos del hambre. Miguel Hernández, a quien tanto quería, le llevaba naranjas de su huerta y don Vicente le miraba hasta el fondo de los ojos para adivinar el cauce de sus sueños. Pepín Bello, Manolo Altolaguirre, Federico, Carlos Morla… iban hasta él porque necesitaban de su voz y, de su mano, las caricias. Cuando en alguno de ellos, don Vicente descubría posibilidades se lo llevaba a las habitaciones de dentro, a los humedales de la casa y allí se conmovían.

En Velintonia 3 están las voces guardadas de la mejor cultura. Nuestros sentimientos perdidos en ella bailan todavía.

Está la casa en venta y, por mucho que pidan, no habrá dinero para comprarla.

Responder

Your email address will not be published.

No olvides...

señora del Caudillo" señoras esposa

Señoras de… (II)

Carmen Polo, "La señora del Caudillo"

El callejón de la duda

Don Benito Pérez Galdós ya sitúa este lugar madrileño, de nombre tan singular, como muy cercano al Palacio de Oriente

Dios invocado

Todos los gobernantes tiene sus propios defectos (y los que no gobernamos también)

Impunes

La señora del Presidente de Gobierno ha asistido a la convocatoria de la Asamblea de Madrid