La denuncia fue archivada al considerarse que “no merece ningún reproche penal”
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha explicado este martes que la denuncia archivada por Fiscalía en la que se denunciaba al Gobierno municipal por no ondear la bandera LGTBI en la fachada de Cibeles durante el Orgullo responde a una “banalización de delito de odio”, y ha apuntado al Grupo Mixto como responsable.
“No hay nada peor con los delitos de odio que banalizarlos, que calificar todo como delito de odio. Lo vimos la semana pasada con lo ocurrido en el Elías Ahúja, hechos que yo condeno. Y atribuir un delito de odio por no colocar la bandera LGTBI cuando este Gobierno llenó Madrid de banderolas LGTBI, subvencionó el Orgullo, puso espacios públicos novedosos como la Plaza de España. Solo se puede entender desde la banalización del delito de odio”, ha trasladado ante los medios de comunicación reunidos en la celebración de la patrona de la Guardia Civil.
La denuncia se interpuso por la presunta comisión de delitos de odio, prevaricación administrativa o dejación de funciones después de que el equipo de Gobierno del alcalde José Luis Martínez-Almeida no accediera a que ondeara la bandera arcoíris en el Palacio de Cibeles durante la semana del Orgullo en Madrid.
Una decisión que se toma al considerarse que “no merece ningún reproche penal”, sobre todo, a la vista de la “intensa actividad institucional desplegada por el propio consistorio” durante esos mismos días.
Así, el alcalde de Madrid entiende que fue interpuesta “desde las urgencias desaforadas de una persona que presentó esa denuncia y solo busca la lista electoral en la que meterse en mayo de 2023”. “Hay algunas personas que no saben dónde se tienen que sentar, si en el Grupo Mixto o no, y no tienen claro dónde sentarse en la legislatura que viene”, ha sentenciado.